E = c+(a)2. El éxito es igual a la suma del conocimiento y la actitud elevada al cuadrado. Desgranando esta ecuación, Mediaset España y Randstad han celebrado desde el Estudio 2 bajo la conducción de Roberto Arce, un evento conjunto dirigido a los empleados del grupo de comunicación y sus hijos para abordar la realidad económico laboral imperante hoy día. En un momento de absoluta transformación por el empuje tecnológico y por la incertidumbre provocada por la pandemia, el evento ha dado a conocer a sus asistentes virtuales los retos laborales y los empleos más demandados por las empresas, los conocimientos, las competencias, las capacidades, la actitud, el talento y los grandes desafíos que el actual mercado laboral demanda, así como la gestión de la frustración y el miedo derivada de la crisis del coronavirus.
Randstad y Mediaset España han contado para ello con la aportación de Valentín Bote, director del Instituto Randstad Research; Mario Alonso Puig, médico cirujano, experto del cerebro humano, divulgador y escritor; y Mónica García, consulting project manager de Randstad, tres grandes expertos formación, capacidades, resiliencia y gestión del talento personal, en sendas ponencias tras las cuales ha tenido lugar una mesa redonda moderada por el periodista Roberto Arce.
Valentín Bote ha explicado que “hay dos tendencias claras en el mercado de trabajo a medio plazo: el impacto tecnológico y el déficit de talento. Más del 50% de los actuales puestos de trabajo en España están en riesgo de ser automatizados. Estamos en una transformación plena del mundo laboral en el que la mayoría de los empleos futuros están aún por dibujarse, pero donde la tecnología está impactando cada vez más en profesiones relacionadas con el big data, el software, la inteligencia artificial, la seguridad de las transacciones, las comunicaciones, etc. Las empresas no encuentran personal cualificado para cubrir muchos puestos de trabajo relacionados con estos y otros muchos empleos, y si no lo encuentran en nuestro país, lo buscarán en otros países del mundo. A futuro, aquel que no se esfuerce hoy por estar bien formado y cualificado, corre riesgo de quedarse fuera del mercado laboral o de sufrir para incorporarse. Aunque no todo son conocimientos, sino que el talento es el factor clave para las empresas”. El director del Instituto Randstad Research, ha finalizado su ponencia explicando a los asistentes más jóvenes que “la elección más exitosa es hacer algo que os gusta, algo que hagáis bien y algo que hoy os ofrezca buenas oportunidades de salida profesional”.
En este sentido, Mónica García, consulting project manager de Randstad, ha explicado que “el 85% del éxito laboral de una persona depende de las competencias y sólo el 15% de los conocimientos, y nos encontramos con que el 40% de las empresas echan en falta candidatos con las competencias necesarias. En los procesos de selección que hacemos en Randstad hemos cambiado el foco para centrarnos en las competencias más que en la experiencia. Teniendo en cuenta una muestra de más de un millón de inscritos a nuestra herramienta ADN que analiza las competencias de cada candidato, hay cuatro competencias clave en las que los españoles destacamos: somos muy buenos en orientación a resultados, en negociación colaborativa, en trabajo en equipo y en calidad; y otras cuatro en las que en general los españoles debemos mejorar, que son la innovación, la conexión emocional y resiliencia, la organización y planificación y la agilidad en la toma de decisiones”.
Sobre la capacidad de resiliencia y la capacidad que tiene la actitud en momentos como el actual, marcados por la incertidumbre, Mario Alonso Puig, por su parte, ha explicado que “no es más fuerte la especie que mejor sobrevive, sino la que mejor se adapta. Estamos ante una nueva realidad, y caer en la negatividad no nos ayuda en absoluto. Aparecerán unos puestos de trabajo y desaparecerán otros, y esa ambigüedad no nos puede frenar, tenemos que encontrar recursos y sacarlos a flote. Habrá veces que os encontréis ante trabajos que os ilusionen, y una vocecita te dirá no tienes capacidades, no eres válido, otra que te dirá que es arriesgado: la razón se puede volver en contra nuestra, pero es el corazón con su sabiduría, y el corazón es la actitud, el que te diga inténtalo, no te conformes, no te quedes en tu zona de confort, porque lo que tú creas de verdad lo vas a crear en el mundo real. La actitud tiene una importancia fundamental en esto, y hay tres elementos claves para afrontar las situaciones como la que estamos viviendo: la capacidad de adaptación, resiliencia y capacidad de innovación”.
Sobre el impacto en el cerebro que las situaciones de incertidumbre generan, Puig ha expuesto que “nuestro cerebro se ha ido formando en el proceso evolutivo poniendo partes más modernas sobre partes más antiguas. Por eso tenemos un cerebro reptiliano, otro más emotivo, otro más racional, pero el cerebro emocional es el que manda. Porque el ser humano elige con el corazón y justifica con la razón”. Y lo ha definido como “la inteligencia del corazón”
“Vivimos en un mundo volátil, ha proseguido, pero la persona que comete un error no es una persona que fracasa. Fracasa quien no aprende de ese error. Si quieres tener un buen trabajo, primero tienes que sentir una ilusión profunda de acceder a él, un buen porqué que ayude a encender el cerebro ejecutivo que te ayuda a encontrar cómo hacerlo. Porque no olvidemos que la mayor parte de los límites los ponemos nosotros, con esa vocecita interior que nos hace pequeños. Todos tenemos talento y hay que dejarle que salga, por eso es tan importante la actitud”.
El experto ha concluido explicando que “es fundamental que evitemos tomar la posición de una víctima, enfócate en conseguir lo que quieres, no en evitar lo que temes; recuerda que la imaginación tiene la capacidad de crear, visualiza el éxito para favorecer que eso ocurra; utiliza un lenguaje que te ayude, no que te anule y abrámonos a la posibilidad de que lo extraordinario pueda manifestarse en nuestra vida con ilusión, ganas, empeño, compromiso y determinación. Si vamos a dudar de algo, que sea de nuestros límites, hagamos un canto a la arrogancia, y no dejemos que el pasado se cuele en nuestro presente, y mucho menos en nuestro futuro”.
Fuente: PRENSA MEDIASET