Ave Fénix
Poemas de la esperanza contra el coronavirus
XXVII
21 de abril de 2020
El tiempo de renacer vendrá algún día
José Antonio Iniesta
Hasta los pétalos de las flores
se cierran cuando llega la noche,
así que de vez en cuando
hay que recoger al niño interno
y guardarlo bien dentro,
en ese rincón del espíritu
en el que pueda dormir
el sueño de los justos.
Hay mucho ruido por tardes partes,
demasiados gritos y golpes de sable,
un olor a pólvora de arcabuz
y siempre confusión inaceptable.
No solo nos parte la vida un coronavirus,
también consume tanto delirio colectivo,
ese grito de horror que algunos extienden
arrasando hasta los prados más verdes,
esa frialdad de muertos vivientes
a los que durante toda una vida
les di un corazón ardiente.
Regresar al silencio es justo y necesario,
un viaje interior para ser como el aire,
invisible e intocable.
El tiempo de renacer vendrá algún día,
después de que el sueño cure las heridas.
Hasta las aves de más alto vuelo
necesitan regresar al nido
y cerrar los ojos sin mirar al cielo.
Un candado muy viejo,
con forma de corazón,
he puesto en las redes sociales,
el símbolo habla por sí mismo
y no necesita de palabras.
Para ser mariposa,
y no morir en el intento de la vida,
más tarde o más temprano
la oruga tiene que convertirse en crisálida.
Lejos del mundanal ruido
me llama el espíritu del silencio…
Fuente: Textos recopilados de las páginas web Luz de Ilunum y Sieteluces, además de los canales de youtube Luz de ilunum y Editorial Sieteluces, textos propios y/o recopilados por el escritor e investigador José Antonio Iniesta Villanueva.
