365 FLORES DEL CORAZÓN. MANIFESTACIÓN – DICIEMBRE (DEL L AL 15). POR SRI CHINMOY

CURSOS DE LUZ

365 FLORES DEL CORAZÓN

DICIEMBRE 2011 – MANIFESTACIÓN – (del 1 al 15)



Por Sri Chinmoy

1 de diciembre

El secreto de la manifestación es la dedicación en secreto.

Si alguien nos pregunta: “¿Qué ha hecho Dios por ti?”  ¿Cuál será nuestra respuesta?  Podemos sentirnos llenos de orgullo cuando digamos: “Dios ha hecho por mí esto, Dios ha hecho por mí aquello, Dios ha hecho por mí todo”.  Podemos estar espontáneamente orgullosos de que Dios nos haya aceptado como Suyos.  Pero si alguien nos pregunta: “¿Qué has hecho tú por Dios?”  ¿Cuál será nuestra respuesta?  ¡Silencio!  Así pues, el pequeño esfuerzo personal que hacemos es por nuestro propio bien.  Cuando hacemos este esfuerzo personal, nuestra vida entera se carga de orgullo divino.  No es nuestro ego, sino nuestra unicidad consciente con Dios, lo que nos motiva a hacer algo por nuestro Más Querido.  Si hacemos esfuerzos personales sinceramente, Dios va a sentirse muy conmovido con nosotros.  ¿Por qué?  Porque Él podrá decirle al mundo: “Mi hijo, Mi instrumento elegido, ha hecho esto y aquello por Mí”.  Mediante el esfuerzo personal podemos hacer merecedora nuestra existencia en la tierra y, al mismo tiempo, podemos hacer que Dios esté orgulloso de nosotros.

Si eres
un verdadero ser humano,
sólo tendrás
una respuesta para Dios:
un alegre ¡SÍ!

2 de diciembre

Dios nos ha dado capacidad.  En función de nuestra capacidad, Él solicita nuestra manifestación.  Dios nunca ha solicitado ni solicitará manifestación que esté fuera del alcance de nuestra capacidad.

No tenemos que saber lo que Dios quiere que manifestemos.  Sólo hemos de rezarle cada día a Dios: “Oh Amado Supremo, manifiéstate en mí y a través de mí.  Yo no sé, ni necesito saber lo que quieres de mí.  Mi deseo ferviente, mi ferviente aspiración, es sólo que Te manifiestes en mí y a través de mí, que me hagas un amante de Dios rendido incondicionalmente y un instrumento Tuyo”.

Mi Amado Supremo me dice
que mis sueños sonrientes
han de ser transformados
en realidades danzantes.
Sólo entonces podré complacerle
a Su propia Manera.

3 de diciembre

Un alma realizada clama por manifestar a Dios.  Siente que una vez alcanzada la realización empieza propiamente su papel en el Drama Cósmico.

Solamente tenemos que implorar a Dios sinceramente para que se manifieste en nosotros y a través de nosotros.  Si devenimos en Su instrumento incondicional, ¿qué va a hacer Dios?  Él va a colmarse en y a través de nosotros a Su propia Manera.  Por lo tanto, expresemos nuestro deseo de manifestar a Dios, pero no preguntando “Dios, dime qué quieres que haga.  Entonces podré complacerte”, sino diciendo “Dios, haz lo que quieras en mí y a través de mí”.

Cuando tu mente empiece a disfrutar
la unión completa con Dios,
tu vida se convertirá, sin falta,
en la manifestación absoluta de Dios.

4 de diciembre

Mi experiencia interna es la manifestación continua de la propia Perfección de Dios en mí y a través de mí.

¿Qué es la perfección?  La perfección es la realización.  La perfección es la manifestación.  La perfección en el mundo interno significa la realización.  La perfección en el mundo externo significa la manifestación.  Un buscador es una fusión de individualidad y personalidad.  Cuando un buscador lleva su individualidad abnegada hacia la visión más alta de la Realidad y ofrece su personalidad todo-amorosa al Absoluto Más Allá, alcanza la perfección en el mundo de la Eternidad del Infinito.

Cuando Dios vino y me dijo
que haría de mí
Su instrumento perfecto,
yo inmediatamente
compartí estas buenas noticias
con mi corazón.

5 de diciembre

Cuando sonrío, Dios es mi experiencia manifestadora.

Es cierto que si posees paz o luz puedes manifestar a Dios.  Pero en vez de rezarle a Dios por estas cualidades divinas, es mejor rezarle para que te dé lo que Él sienta que necesitas más para tu evolución interior y Su satisfacción.  Es bueno sentir: “Dios, si Tú no quieres que yo sea Tu instrumento perfecto, no me sentiré mal.  Algún otro podrá serlo si esa es Tu Voluntad.  Incluso si quieres hacer de mi peor enemigo Tu mejor instrumento, hazlo.  Yo sólo quiero que Tú seas colmado a Tu propia Manera”.  Si puedes ofrecer sinceramente este tipo de oración a Dios, tus problemas están resueltos.

¡Olvida todo y empieza otra vez!
Reúne el coraje
para devenir en un instrumento perfecto
de Dios.

6 de diciembre

Si Dios te requiere, abre los ojos, cierra los oídos y corre.

Tenemos que sentir que la acción misma es una gran bendición, pero el resultado de la acción debemos tomarlo como una experiencia.  Conforme a nuestro limitado entendimiento propio, lo veremos como un fracaso o como un éxito.  Pero para el Ojo de Dios, el fracaso y el éxito son sencillamente experiencias que ayudan a desarrollar nuestra conciencia.  Cuando actuamos, tan sólo debemos esperar cumplir la Voluntad de Dios.  Pase lo que pase, deberíamos considerarlo como una experiencia que Dios ha querido darnos.  Hoy puede darnos la experiencia del fracaso.  Mañana puede darnos otra experiencia que exteriormente nos satisfaga.  Pero si vivimos una vida espiritual, sea cual sea el resultado de nuestra acción, estaremos satisfechos.

¡No discutas,
no pienses,
haz!

7 de diciembre

Dios nunca nos pedirá hacer algo que no esté al alcance de nuestra capacidad.  Él nos ha dado la capacidad necesaria.

Tal vez digas que ahora mismo no sabes donde está la meta.  No te preocupes.  Simplemente muévete.  Si vas en la dirección errónea, pronto te darás cuenta y cambiarás de dirección.  Finalmente alcanzarás tu meta.  Pero si no te mueves  en absoluto, no hay esperanza alguna de que vayas en la dirección correcta.  Si no puedes hacer trabajo desinteresado, trabajo dedicado,entonces trabaja primero por un motivo.  Si el ego y la vanidad vienen mientras estás ayudando a alguien, déjalos venir.  Llegará el día en que sientas que la satisfacción que estás obteniendo no es bastante.  Comprenderás que sólo dura unos pocos segundos.  Entonces intentarás trabajar de una manera más divina.

¿Quién soy yo?
Soy el trabajo inacabado de Dios
de mi vida.

8 de diciembre

No vamos a fallarle a Dios, porque Le amamos y porque Dios nos ama.  El amor es unicidad, unicidad inseparable.  Cuando entonamos la canción de la unicidad inseparable, no podemos fallar.

Nosotros y Dios debemos tener fe recíproca.  Nuestra fe en Dios nos hará Sus instrumentos elegidos.  Su fe en nosotros nos inspirará a manifestarle totalmente, sin reservas y perfectamente aquí en la tierra.  Nuestra fe en Él nos dará lo que desesperadamente necesitamos: la realización.  Su fe en nosotros Le dará la oportunidad de manifestarse en y a través de nosotros.  Nosotros Le necesitamos para nuestra más alta realización; Él, por Su Amabilidad infinita, nos necesita para Su manifestación divina.

Mi promesa de manifestación de Dios
nunca será rota por mí.
Mi esperanza de satisfacción de Dios
siempre será expresada por mí.

9 de diciembre

Cuando Dios envía a buscarte, ten la determinación de estar disponible en el hogar de tu corazón.

En última instancia, el esfuerzo personal ha de convertirse en una entrega dinámica de ti mismo.  Cuando hacemos algo, ofrecemos a los Pies de Dios el resultado de nuestra acción junto con la aspiración que hemos empleado para llevar a cabo esa acción en particular.  Cuando podemos ofrecerle a Dios los resultados y la aspiración, el impulso interno, a eso se le llama verdadera entrega.  Pero tenderse simplemente a los Pies de Dios como un cadáver y dejar que Dios trabaje en nosotros, a través de nosotros y para nosotros es un error.  Dios no quiere trabajar en y a través de un cuerpo muerto.  Quiere alguien que esté aspirando, alguien que quiera ser energizado y que quiera hacer algo para Él.  Quiere alguien que sea activo y dinámico y que quiera manifestar todas las cualidades divinas aquí en la Tierra.

No más, ya no necesito más
una vida de parálisis.
Necesito una vida
de rápida consecución.

10 de diciembre

Cada momento puedes emplearlo para Dios, para el Supremo, o para tu propia finalidad.  El tiempo que está pasando no va a volver.

El deber es doloroso, tedioso y monótono, simplemente porque lo haces con tu ego, tu orgullo y tu vanidad.  El deber es placentero, alentador e inspirador, cuando lo hacemos por amor a Dios.  Lo que necesitamos es cambiar nuestra actitud hacia el deber.  Si trabajamos por amor a Dios, entonces no hay deber.  Todo es alegría.  Todo es belleza.  Cada acción ha de realizarse y ofrecerse a los Pies de Dios.  El deber por amor a Dios es el deber supremo.  No tenemos derecho a asumir ningún otro deber antes de resolver nuestra propia salvación espiritual.  ¿No nos ha confiado Dios esta maravillosa tarea en la hora misma de nuestro nacimiento?  El deber supremo es luchar tenazmente por la realización de Dios.  El tiempo es corto, pero la misión de nuestra alma en la Tierra es elevada.  ¿Cómo podemos perder el tiempo?  ¿Porque deberíamos gastar el tiempo en los placeres de los sentidos?

Cuando Dios revela
Sus Planes,
muestra tu entusiasmo inmediato
para manifestarle.

11 de diciembre

Si no pones tu meditación en acción, estarás corriendo con una sola pierna.

Muchos han realizado lo más Elevado, la Verdad Transcendental.  Pero pocos hay que imploran por la perfección de la humanidad.  Hay muy pocos que intentan cambiar el rostro del mundo.  Los instrumentos elegidos de Dios quieren manifestar a Dios aquí en la Tierra.  No les importa mucho el mal o el bien terrenales.  Ellos trascienden el llamado bien y mal.  Sólo buscan los dictados internos de Dios.  Escuchan constantemente los dictados de su Piloto Interno; y entonces, en virtud de su unicidad inseparable con su Piloto Interno, ofrecen su servicio desinteresado y dedicado a la humanidad.  Intentan ofrecer conocimiento, el conocimiento divino, a la humanidad aspirante.  Además, le dicen a la humanidad que la realización de Dios no es monopolio de ellos.

Necesito solamente la felicidad de mi corazón
para implorar sin descanso
por la manifestación de Dios
aquí en la Tierra.

12 de diciembre

En el juego cósmico de Dios, cada alma individual desempeña una parte reveladora de Dios y manifestadora de Dios.

Hemos de entrar en el campo de la manifestación.  Si no manifestamos lo que hemos realizado aquí en la Tierra, si la Madre Tierra no recibe el fruto de nuestra realización, y si Ella no lo tiene para siempre, nunca podemos estar verdaderamente colmados.  La Madre Tierra ha de ser nutrida con el fruto de nuestra realización.  La manifestación de la realización ha de tener lugar aquí en la Tierra; y cuando la manifestación tiene lugar, la perfección está destinada a aparecer.  La perfecta Perfección no es otra cosa que la manifestación absoluta de la Voluntad Trascendental de Dios aquí en la Tierra.

Tal vez yo no sea o no pueda ser un miembro
del equipo de manifestación de la Visión de Dios
en la Tierra,
pero amo profundamente
el corazón de unicidad con Dios del equipo
y admiro profundamente
sus manos de plenitud de Dios.
Mas yo sé y siento que Dios
finalmente hará de mí un miembro
del equipo de manifestación de Su Visión.

13 de diciembre

En la vida espiritual, un instrumento cualificado y manifestador de Dios es aquel que aprende las instrucciones dadas por el Piloto Interno, a la vez que desaprende las instrucciones ofrecidas por la noche de ignorancia.

La mejor manera de sentir que eres un instrumento del Supremo es cuando puedes sentir que no hay mas realidad que el Supremo.  Este es el primer paso.  Luego has de sentir que tú  puedes vivir sin Dios, tú puedes vivir si ti, pero Dios no puede vivir sin ti.

Lo has intentado.
No lo has conseguido.
Eso no significa
que no lo vas a intentar más.
¡Prueba otra vez!
No sólo triunfarás
en la vida que deviene
sino que también avanzarás
en la vida que eternamente es.

14 de diciembre

Sólo estamos clamando por una cosa: llegar a ser instrumentos buenos, perfectos, incondicionales de Dios, de manera que Dios pueda manifestarse en nosotros y a través de nosotros.

Si puedes hacerte sentir que, ya necesites a Dios o no, Dios te necesita, entonces tu problema está resuelto.  No es tu ego humano el que dice: “Soy tan grande… yo no necesito a Dios pero Dios me necesita”.  No.  Precisamente porque Dios tiene mucho más conocimiento y sabiduría, Él te necesita.  Precisamente porque Él es el Creador, es consciente de Su Creación.

Sigue haciendo lo correcto,
Dios mismo irá
y recogerá los capullos-gratitud
que el mundo te debe.

15 de diciembre

No des por sentado que has conseguido a tu Señor Supremo.  Cuando te vayas al otro mundo, quizá no puedas verle a tu antojo si no has intentado satisfacerle sinceramente durante los años y años en los cuales te ha ofrecido innumerables oportunidades en la Tierra.

Cuando el único clamor de mi corazón es complacer a Dios a Su propia Manera, Dios puede entonces manifestarse en mí y a través de mí.  Cuando mi llanto interno me lleva a Dios, Le digo: “Oh, mi Amado Supremo, haz de mí tu instrumento perfecto”.  Cuando Dios viene a mí, me da una Sonrisa explícita –una Sonrisa amplia, llena de alma e iluminadora– y me dice: “Hijo mío, haré de ti Mi instrumento perfecto, y al mismo tiempo, Me manifestaré en ti y a través de ti”.

Hubo un tiempo
en que me moría
por la perfección del ser humano.
Ahora estoy viviendo solamente
para la manifestación de Dios.

Fuente: Textos recopilados de las páginas web Luz de Ilunum y Sieteluces, además de los canales de youtube Luz de ilunum y Editorial Sieteluces, textos propios y/o recopilados por el escritor e investigador José Antonio Iniesta Villanueva.