LO QUE VENDRÁ DESPUÉS DE LAS PRUEBAS (4ª. PARTE) DEL «LIBRO DE LA VIDA VERDADERA»

LO QUE VENDRA DESPUÉS DE LAS PRUEBAS  (4a. parte)



Del Libro de la Vida Verdadera

PROFECIAS Y OTROS TEMAS

07-175.71 Estas profecías habrán de cumplirse entre los hombres, cuando el hambre y la sed espiritual les hayan llevado hasta los límites de su resistencia, cuando, abatida su soberbia, se confiesen delante de su Señor; cuando desciendan de sus tronos, de sus tribunas y de sus sitiales, desde donde han tratado de ignorarme, desde dónde me han juzgado y negado y arrepentidos de sus errores vuelvan sus ojos hacia Mí y me hablen como hijos a un Padre que les ha estado esperando por siglos y siglos.

07-175.76 Yo os di el don del libre albedrío y he respetado esa bendita libertad concedida a mis hijos; pero también puse en vuestro ser la luz divina de la conciencia, para que guiados por ella encaucéis Vuestros dones; y Yo os digo que en la lucha del espíritu y la materia, ha sufrido el espíritu una derrota, una caída dolorosa, que poco a poco lo ha ido alejando más y más de la fuente de la verdad.

07-175.77 Mas su derrota no es definitiva, es pasajera, porque del fondo del abismo se levantará cuando ya no pueda soportar su hambre, su sed, su desnudez y sus tinieblas. Mas el dolor será su salvación, y oyendo la voz de su conciencia se levantará fuerte y luminoso, ferviente e inspirado, tomando nuevamente sus dones, pero ya no con aquella libertad de aplicarlos al bien o al mal, sino consagrándolos tan sólo al cumplimiento de las leyes divinas, que es el mejor culto que podéis ofrecer a vuestro Padre que tanto os ama.

07-178.57 Buscadme con el corazón limpio, oyendo siempre la voz de vuestra conciencia y en verdad os digo que muy pronto me encontraréis; antes de que vuestro espíritu levante el vuelo, habré venido a vosotros para llevaros a esa mansión de paz que os tengo prometida; mas es menester que conozcáis la senda que conduce a Mí; vuestro camino está trazado hacia la espiritualidad. Para escalar la cima, debéis orar y trabajar. No contemplo aún entre los pueblos de la tierra la santa aspiración de espiritualizarse. El materialismo no ha llegado al límite permitido por Mí; pero está cerca el fin de esa etapa. Después buscaréis con ansiedad retornar a la práctica del amor y la caridad para labrar con méritos la elevación de vuestro espíritu..

07-178.58 Las tinieblas que forman el pecado y la confusión, serán disipadas y la verdadera ley iluminará a todos los seres.

07-178.59 Os estoy concediendo grandes mirajes que os hablan del futuro, para que lleguéis a analizarlos y estéis preparados. Dad testimonio de esto a vuestros hermanos; mas llegará el momento en que los hombres de distintas razas y de diversos pueblos vean en el infinito mis señales y ello será consuelo para unos y feliz cumplimiento para otros que en ello verán el cumplimiento de mi palabra.

07-193.18 Antes de que en mi ley se unan los hombres, habrá rumores de guerra. La humanidad se depurará y entonces vendrá el reinado del Espíritu Santo.

07-194.33 La vida entonces cambiará. Las religiones, la moral, la ciencia, la filosofía, todos los conceptos sufrirán grande transformación y los hombres, conociendo por fin el verdadero sentido de la vida, tratarán de acercarse al cumplimiento de mis leyes de amor, de justicia y caridad.

07-197.45 Vengo a preparamos porque una nueva etapa va a comenzar. Tiempo de gran espiritualidad y elevación va a ser el que suceda a éste en el que os estoy dando mi palabra.

08-214.69 Hoy se encuentra todavía mezclado el Trigo con la cizaña, mas cuando ésta sea exterminada y el trigo brote en doradas espigas, llegará la Era esperada por la humanidad.

08-218.33. Después de mi partida, vendrá la depuración en este pueblo; será en pleno tiempo de luchas y contiendas mundiales, después de las cuales vendrá la paz y huirá la miseria.

08-221.30.Ayer, Israel era un pueblo de la Tierra, hoy, es una multitud diseminada en el mundo; mañana, el pueblo de Dios estará formado por todos los espíritus, los cuales en perfecta armonía, formarán junto con su Padre, la familia divina.

08-221.57. A todos debéis llevarles mi palabra con la misma pureza con que os la he dado, sencilla en su exterior y profunda en su fondo, sustanciosa, plena de revelaciones para todos, lo mismo se trate de entendidos que de rudos. Y después de las grandes luchas que en el mundo se van a librar en busca de la verdad, triunfará mi Doctrina, prevalecerá una sola idea; el culto de los hombres a la Divinidad se simplificará para hacerse espiritual. Habréis conocido todos los caminos y habréis elegido el más corto para llegar a Mí.

08-221.59. Veréis convertirse a mi enseñanza a los grandes príncipes y dejar su reinado, su poder temporal para alcanzar el del espíritu, aquél que no se acaba jamás. Así veréis derrumbarse iglesias que antes lucieron fuertes en su soberbia y vanidad, para seguir mi huella de humildad. Los hambrientos buscarán con avidez hasta en la última de mis palabras al Espíritu de Verdad, al Consolador, al Maestro que regresa triunfante para restablecer su Reinado en el espíritu de los hombres.

08-221.61. Siempre que la humanidad se ha encontrado en peligro, he llegado para salvarla. Hoy estoy preparando a mi pueblo para que sea baluarte de esta humanidad que se ha empeñado en tantas luchas, que ha caído en un caos del cual no ha podido levantarse. Cuando esta prueba haya pasado, brillará el iris de la paz.

08-221.62. ¿Quiénes de vosotros estaréis en la Tierra para ese tiempo? ¿Quienes verán esa era de paz? En verdad os digo que no está lejano ese día y entonces este mundo será una imagen de la Tierra de Promisión que existe en el más allá.

08-221.63. El amor, que es el principio y la razón de ser de vosotros, estará en todos los corazones de los que se elevará un culto sencillo y puro que llegará a Mí.

08-222.14. ¡Perseverad todos en la esperanza, porque será muy grande la paz después de ese caos! Y será muy grande la bonanza, la misma Naturaleza que a veces os parece hostil, la veréis amable en sus distintas estaciones. Los montes valles y   collados, ostentarán exhuberancia y belleza. Los árboles se cargarán de buenos frutos y la salud, el bienestar y la paz, envolverán la vida humana.

08-224.08. Después de gran lucha, la paz vendrá a los hombres. Hoy encontráis enemigos para vuestra fe, espiritualidad y buenas prácticas, porque el ambiente que reina es impuro y no habéis podido detener el avance del mal, y en verdad sois vosotros los encargados de transformar este mundo devolviéndole la salud, la paz y la fe que ha perdido.

08-224.09. En vuestra lucha, no estaréis solos. Vuestro Dios lucha antes y siempre. Las fuerzas del mal, serán atadas, la humanidad será libre y rehará su vida y la fe volverá a su corazón.

08-229.10.En este tiempo como en los pasados, la humanidad tiene comunicación con mi Divinidad, por vuestro conducto. A través de vosotros trazo el camino a los demás, y mañana vendrán por él, una a una todas las sectas y religiones. Los hombres llegarán a unificarse espiritualmente, porque sólo un Dios existe y en El seréis todos.

08-229.71. El Reino de paz se acerca y aun cuando no sabéis cuanto falta para que ese tiempo llegue, Yo ya he comenzado mi Obra de reconstrucción moral y espiritual. Entonces este mundo que hasta ahora ha sido valle de expiación y lágrimas, será morada de espíritus adelantados.

08-231.26. Llegará un tiempo en que la Humanidad sabrá distinguir la luz divina, la sabiduría permitida por Mí, y llegará a reconocer que Yo soy la fuente de donde han brotado todas las naturalezas, que en Mí se encuentra la simiente y el fruto, y que de todo esto os he participado para que hagáis una vida digna de vuestro espíritu y de mi Divinidad.

08-231.27. Y es en ese tiempo de espiritualidad, que ahora os anuncio, en el que los hombres pondrán su fuerza mental al servicio del espíritu, y la misma ciencia se inclinará ante su luz. ¿Cuándo llegará ese día? Vosotros estáis preparando el camino para que la Humanidad pueda llegar a esa meta, porque la obra que os he encomendado tiene una misión universal.

08-231.28. Los hombres, sin apartarse de sus deberes, de sus misiones en el mundo, pondrán al servicio de mi causa divina su ciencia, su fortaleza, su talento y su corazón. Buscarán los goces sanos, los que sean saludables para su espíritu y su materia. Lucharán por su regeneración y por su libertad, no se contaminarán, no tomarán lo que no les sea necesario. Será entonces cuando desaparezca de la Tierra la maldad, la frivolidad; entonces el espíritu habrá alcanzado el dominio absoluto sobre su envoltura, y habitando todavía en una materia hará una vida espiritual de amor, de fraternidad y de paz.

08-231.29. Ese será el tiempo en que las guerras desaparecerán, cuando haya respeto y caridad de unos a otros, cuando reconozcáis que ya no podéis disponer de la vida de un semejante, ni de la propia; sabréis entonces que no sois dueños de vuestra vida, ni de la de vuestros hijos y esposos, ni de esta Tierra, sino que Yo soy el dueño de toda la Creación; pero que siendo vosotros mis hijos muy amados, sois también poseedores de todo lo que es Mío. Y siendo el dueño y poseedor de todo lo creado, soy incapaz de dar muerte a mis criaturas, de herir o causar dolor a nadie; ¿Por qué, entonces, los que no son dueños de la vida han tomado lo que no es suyo para disponer de ello?

08-231.30. Cuando esta enseñanza sea comprendida por los hombres, habrán escalado en su evolución espiritual y este mundo será una morada de espíritus adelantados. No sabéis si después de este tiempo volveréis a habitar este planeta. Yo señalaré a aquéllos que habrán de mirar esos tiempos de gracia, a los que habrán de venir a contemplar este valle que en otra época fuera un valle de lágrimas, de destrucción y de muerte. Esos mares, montes y campos que fueran testigos de tanto dolor, después estarán convertidos en una morada de paz, en una imagen del Más Allá. Yo os he anunciado que cuando las luchas cesen, mi Reino estará ya cerca de vosotros y que vuestro espíritu florecerá en virtudes; mi Doctrina estará presente en todos los espíritus y por conducto de hombres y mujeres me manifestaré. Ap.22:3-5.

08-231.31. Los dones espirituales se desarrollarán; el don de palabra, de curación y de comunicación de espíritu a Espíritu llegarán a ser asombrosos en los hombres de esos tiempos.

08-231.32. La ciencia no se detendrá en su camino, y el científico penetrará en mi Doctrina para estudiarla y se maravillará con mis revelaciones, e inspirado por ellas hará obras benéficas que llevarán al adelanto y al progreso, no sólo a la Humanidad, sino al espíritu de encarnados y desencarnados.

08-231.33. Si en los tiempos pasados y en los presentes ha gozado mi Espíritu contemplando las obras de mis hijos, ya sean estas espirituales o materiales, obras bellas que han brotado del corazón, de la sensibilidad o de la inteligencia, cuán grande será mi gozo cuando no sean tan sólo unos cuantos los que se encuentren con su espíritu elevado, sino que sea la Humanidad en su conjunto la que esté practicando el amor. Entonces ya no habrá lágrimas, luto ni orfandad en los hogares por causa de las guerras, y sólo será la fe, la salud, la fuerza y la armonía las que persistirán en la vida de los seres humanos en esos tiempos de dicha reservados a este planeta.

08-232.43. Aún cuando en el presente os parezca imposible cimentar la paz entre la Humanidad, Yo os digo que la paz se hará y aún más, que el hombre practicará la espiritualidad. Ap.22:3.

08-232.44. Muchas calamidades sufrirá el mundo antes del establecimiento de ese tiempo; pero esos sufrimientos serán para bien de la Humanidad, tanto en lo material como en lo espiritual; serán como un «hasta aquí» a la carrera desenfrenada de maldades, egoísmos y lujuria de los hombres. Así vendrá un equilibrio, porque las fuerzas del mal no podrán prevalecer sobre las fuerzas del bien. La purificación tiene apariencia de castigo sin serlo, porque viene siempre a tocar lo más sensible, lo más delicado y querido; pero en realidad es medio de salvación para el espíritu alejado o perdido del camino. Quien juzga materialmente, no puede encontrar nada útil en el dolor; quien juzga que lleva consigo un espíritu que vive eternamente, extrae, del mismo dolor, luz, experiencia, temple y regeneración.

08-233.37. Señalados están aquéllos que tengan que morar en el mundo en esos tiempos de gracia; y lo que fue valle de lágrimas, campo de destrucción y de muerte, será convertido en un valle de paz.

08-233.38. Será tiempo propicio para el desarrollo y florecimiento de los dones del espíritu. Entonces la ciencia no se impondrá al avance del espíritu, mas sí les concederé penetrar aún más en mis arcanos, donde les revelaré grandes misterios para beneficio de la humanidad.

08-235.77. Y cuando esté la Humanidad preparada, mi voz vibrará en toda conciencia, y los hombres verán que no existe otro poder, otra justicia y otra sabiduría como la mía.

08-235.78. Larga es la historia de este mundo, larga también la jornada de la Humanidad, con la lucha de sus pueblos por alcanzar el cenit, tras del cual ha venido el descenso y el derrumbe. ¡Cuánta sangre derramada por mis hijos con la cual se ha enrojecido la tierra, cuántas lágrimas de hombres, mujeres y niños! ¡Cuántos pecados y errores! pero también, ¡Cuántas pruebas de amor he recibido y cuánta virtud he contemplado! Y después de tanto vivir, aún no habéis alcanzado la meta de paz y redención.

08-235.79. Todavía faltan los últimos combates con sus amarguras y los últimos torbellinos. Falta aún que todas las fuerzas se agiten y los átomos se remuevan en un caos para que, después de todo ello, venga un letargo, una fatiga, una tristeza y un hastío que aparenten la muerte; y ésa será la hora en que se escuche en lo sublime de las conciencias el eco vibrante de un clarín que, desde el Más Allá, os anuncie que el Reino de la vida y de la paz se acerca entre los hombres de buena voluntad. Y ante esa voz, los muertos resucitarán, derramando lágrimas de arrepentimiento y a ellos recibirá el Padre como a los hijos pródigos cansados por la gran jornada y fatigados por la gran lucha, para sellar sus espíritus con el ósculo de amor.

08-235.80. Desde ese día, el hombre abominará la guerra, arrojará de su corazón el odio y el rencor, perseguirá al pecado y comenzará una vida de restauración y de reconstrucción. Muchos se sentirán inspirados por una luz que antes no contemplaron y se levantarán a crear un mundo de paz. Ap.21:1.

08-235.81. Será sólo el principio del tiempo de gracia, de la Era de paz.

08-235.82. La edad de piedra está distante ya. La era de la ciencia pasará y luego vendrá a florecer entre los hombres la Era del Espíritu.

Fuente: Textos recopilados de las páginas web Luz de Ilunum y Sieteluces, además de los canales de youtube Luz de ilunum y Editorial Sieteluces, textos propios y/o recopilados por el escritor e investigador José Antonio Iniesta Villanueva.