SE Joseph Deiss, Presidente de la Sexagésima Quinta Asamblea General de las Naciones Unidas, Discurso de apertura, 14 de septiembre 2010.
Queridos amigos,
La Sabiduría Eterna ha enseñado por mucho tiempo que todo el sistema del Universo, visible e invisible, es el escenario de un gran esquema de evolución en el que la vida avanza hacia una conciencia cada vez más UNIFICADA y responsable y una forma más iluminada o espiritualizada.
Esta Sabiduría indica que la VIDA UNA, también conocida como el Ser Puro, Inteligencia Universal, Arquitecto divino, o Dios, compenetra y sostiene todo lo que existe. “Habiendo compenetrado todo el universo con un fragmento de Mí mismo, Yo permanezco”, proclama Sri Krishna en el Bhagavad Gita.
Esta gran Inteligencia, inmanente en el corazón humano y dentro de cada átomo de sustancia y también trascendente, al margen de toda expresión y manifestación, es la base de todas las leyes de la naturaleza y es la fuerza motriz detrás de toda la evolución.
Desde la perspectiva de la humanidad, la gran triplicidad de deseo, aspiración y dirección (voluntad) caracterizan la orientación evolutiva o el progreso del ser personal, el Alma y el Espíritu o Vida manifestándose a través del yo. Lo que se conoce como el Plan de Luz, Amor y Poder constituye la medida del propósito del Todo o VIDA UNA, que el individuo pueda captar o entender en cualquier etapa particular de su experiencia. Abarca del sumo bien, verdad y belleza que se puede imaginar en cualquier momento.
Así, cuando las primeras luces del Plan aparecen en la conciencia, conllevan también la realización de la UNIDAD de todos los seres y una comprensión sintética de la idea de la evolución. Toda la vida y todas las formas se ven en su verdadero estado de interrelación y, en consecuencia, el esfuerzo constructivo en nombre de toda la vida se vuelve inevitable.
El objetivo del Plan para nuestro tiempo actual es el de reproducir el reino interior del alma en el plano terrestre. Este es el desarrollo evolutivo siguiente en la conciencia de la humanidad. La naturaleza del alma puede ser descrita como amor-sabiduría y la voluntad al bien.
Así, el Plan suscita el desarrollo de una conciencia internacional basada, no en la política del poder o las intenciones imperialistas, sino una conciencia internacional que reconoce la “Hermandad de las Naciones”, una fraternidad basada en la necesidad, la comprensión y ayuda mutuas. Esta hermandad se da cuenta de que los recursos de todo el planeta deben ser compartidos. Se acepta el hecho de que los productos y dones de la tierra y el patrimonio cultural de las naciones pertenecen a toda la humanidad y no exclusivamente a cualquier nación o pueblo.
Esa conciencia está amaneciendo dentro de las NACIONES UNIDAS y es palpable en las últimas actividades.
Enlace: https://www.sieteluces.com/trabajando-para-manifestar-el-plan-de-luz-amor-y-poder-en-las-naciones-unidas/
Fuente: Textos recopilados de las páginas web Luz de Ilunum y Sieteluces, además de los canales de youtube Luz de ilunum y Editorial Sieteluces, textos propios y/o recopilados por el escritor e investigador José Antonio Iniesta Villanueva.
