Por Alejandro Jodorowsky
Ediciones Quintaesencia
CAPÍTULO 3
“HABLA MI DIOS INTERIOR” es un texto con intenciones sanadoras para tod@s aquell@s que han crecido sintiendo no valer nada y no pudiendo encontrar un significado a sus vidas.
1. Yo, tu Dios Interior, soy el centro de tu inconsciente. Sosegadamente espero y velo ocupando con mi ser todo tu tiempo y todo tu espacio.
2. Yo vigilo y espero que acabes con tus egoísmos y debilidades, con tus vanos deseos, ambiciones y pesares, tratando de erigir tu yo personal en medida del mundo.
3. Un día, cansad@ de estas escorias, recurrirás a mí, desalentad@, humilde, y me pedirás que te conduzca, sin comprender que siempre te he estado conduciendo.
4. Sí, yo, tu Dios Interior, he sido quien realmente ha dirigido todos tus pasos; quien ha inspirado todos tus pensamientos, sentimientos, deseos y actos, utilizando y manipulando secretamente a cada uno de estos, a fin de atraerte hacia el reconocimiento y la aceptación de mi poder.
5. Sí, yo, tu Dios Interior, he estado contigo en todos los acontecimientos de tu vida: en tus alegrías y en tus dolores, en tus éxitos y fracasos, en tus buenas y malas acciones, en tu defensa de los débiles y en tu destrucción de plantas, animales y ambiente planetario. En consecuencia, si tú seguiste el camino recto o el camino torcido, sabe que fui yo quien te hizo hacerlo así.
6. Fui yo quien te alentó a seguir adelante, por el vislumbre que de mí te di, permitiéndote percibirme confusamente, a lo lejos, en tu conciencia.
7. Fui yo quien te desvió del buen camino por la visión que de mí te di en algún cuerpo encantador, en un placer intoxicante o en una finalidad ambiciosa…
8. …para que al final, decepcionad@, impur@, enferm@, deprimid@, rebelándote enfadad@ e inspirad@ por una nueva ambición, vinieras por fin a mí.
9. Sí, yo, tu Dios Interior, soy aquel que anima tu cuerpo, hace que tu mente piense, tu corazón lata y tu sexo desee y cree. Yo soy aquel que atrae a ti el dolor, o el placer, sean estos aparentemente corporales, sexuales, emocionales o intelectuales.
10. Sí, yo, tu Dios Interior, soy aquel que te hace hacer todo lo que tú haces, y todo lo que los otros seres hacen, pues yo soy aquel que es en ti y en ellos.
11. Yo soy la causa animante no sólo de tu ser, sino también de todo lo viviente: soy la única realidad. Soy infinito y eterno. El Universo es mi cuerpo. Toda la inteligencia que existe emana de mí, todo el amor que une a lo creado brota de mí, y todos los deseos de crear, todo poder, no son otra cosa que mi voluntad en acción.
12. Todo lo que es, expresa una fase de mí.
13. Te estarás preguntando: “¿Entonces, no hay nada ni nadie más fuera de mi Dios Interior? ¿Podré alguna vez tener individualidad propia?”
14. Nada hay, absolutamente nada que no sea una parte de mí, que soy la única e inconmensurable realidad.
15. En cuanto a tu llamada “individualidad” no es ella sino un mínimo ensueño que aún busca conservar su existencia ilusoria separada de mí.
16. Pero pronto conocerás que no hay otra individualidad aparte de mi individualidad y que toda personalidad está condenada a disolverse en mi divina impersonalidad.
Enlace: https://www.sieteluces.com/habla-mi-dios-interior-capitulo-3/
Fuente: Textos recopilados de las páginas web Luz de Ilunum y Sieteluces, además de los canales de youtube Luz de ilunum y Editorial Sieteluces, textos propios y/o recopilados por el escritor e investigador José Antonio Iniesta Villanueva.