Ave Fénix
Poemas de la esperanza contra el coronavirus
XII
14 de abril de 2020
La Tierra susurraba al oído de los humanos
José Antonio Iniesta
Nos cayó del cielo sin esperarlo
un pedrisco de silencio en las calles,
una lluvia intensa para refugiarnos
en el interior de nosotros mismos.
Cayeron cerrojos a nuestro paso
para estrechas puertas de celdas,
un cautiverio como un mal sueño
que sembró la noche con pesadillas.
Y aun así se abrieron las ventanas
y los balcones a cielo abierto.
Puentes extraños abiertos al misterio,
que nos han cambiado la vida.
Los que antes se habían vuelto ciegos,
recuperaron la vista.
Los que se encerraron como hurones,
abrieron sus brazos a sus vecinos.
Todo era tan diferente como raro,
un territorio inhóspito
que jamás se había surcado.
Y entonces un jabalí pasó por una calle,
los ciervos pastaban en el césped,
las aves anidaban en las fuentes
y los pavos reales tiñeron con un arco iris
el parque donde antes jugaban los zagales.
La Tierra susurraba al oído de los humanos
el canto de un ruiseñor y la melodía del viento,
Fuente: Textos recopilados de las páginas web Luz de Ilunum y Sieteluces, además de los canales de youtube Luz de ilunum y Editorial Sieteluces, textos propios y/o recopilados por el escritor e investigador José Antonio Iniesta Villanueva.
