LA NOOSFERA PUBLICADO POR PILAR VENTURA

UNIDAD – LA NOOSFERA



Publicado por Pilar Ventura

La Noosfera –literalmente- “esfera de la mente” o “capa mental de la Tierra”

Es una palabra y un concepto acuñado conjuntamente por el filósofo francés Edouard le Roi, el paleontólogo jesuita Pierre Teilhard de Chardin y el geoquímico ruso Vladimir Vernadsky, en el París de los años 1920.

En la teoría original de Vladimir Vernadsky, la emergencia del pensamiento humano transforma la Biosfera – la esfera de la vida biológica y el lugar de la transformación de la energía cósmica en la Tierra– hacia su próxima fase del desarrollo: la Noosfera.

Por su lado, Teilhard de Chardin explica la Noosfera como el lugar donde ocurren todos los fenómenos del pensamiento y la inteligencia. Para Teilhard de Chardin, la evolución va desde la Biosfera –o evolución biológica– a la Noosfera –o evolución de la conciencia universal–.

Tanto Vernadsky como Teilhard de Chardin piensan que la Noosfera define la próxima etapa inevitable de la evolución terrestre, que abarcará y transformará la Biosfera. Dicen que por efecto del pensamiento humano se afectan los procesos biológicos en la Biosfera y a raíz de esto se va a crear una crisis. Cuando esta crisis llegue a su máximo, la Biosfera se va a transformar en Noosfera.

Teilhard de Chardin previó el surgimiento de la Noosfera en un momento místico cumbre conocido como el Punto Omega. Este momento sería el resultado de las interacciones de la actividad creciente de las redes humanas creando una “capa de pensamiento, extendiendo una red sobre la Tierra entera.”

Existe una etapa de transición entre la Biosfera y la Noosfera que es llamada la Tecnosfera.

En el Catálogo de la Biosfera (1985), editado por Tango Snyder, se elabora una descripción de la Tecnosfera, la esfera artificial o esfera de la tecnología y la máquina alrededor del planeta. Como un sub-sistema de la Tecnósfera, la Ciberesfera es la red global de información y proporciona la conectividad del sistema de creencias de nuestros días.

Esta capa artificial transforma la Biosfera, destruye el medio ambiente y crea la situación de crisis actual: desertificación, deshielo, sequías, inundaciones, nuevas enfermedades, extinción de especies, calentamiento global…. El impacto a nivel mundial del pensamiento humano, y su transformación en tecnología de máquinas, ha hecho de la Noosfera un fenómeno planetario, aunque inconsciente. Ahora esta Noosfera está en el proceso de volverse consciente. A medida que, lentamente, más humanos se convencen del hecho de que nuestro pensamiento es lo que está en la raíz de la destrucción del mundo, la Noosfera se acerca más a hacerse consciente.

Hemos llegado entonces al punto en que la Biosfera ya no puede sostener más el impacto de la Tecnosfera y este es el punto que Vladimir Vernadsky llama la transición Biosfera – Noosfera. Al definir la siguiente era geológica como la era psicozoica (la espiritualización de la materia), Vernadsky es capaz de afirmar que la emergencia de la Noosfera es igual que los grandes eventos geológicos del pasado.

Posteriormente, Oliver Reiser, un físico norteamericano, visionario y poco conocido pensador de sistemas enteros, amplía el concepto de Noosfera, describiéndolo como el Campo Psi planetario. En 1966, Reiser define este Campo Psi: “es un campo mental que interactúa con el campo electromagnético de la Tierra cuya estructura se encuentra dentro del campo electromagnético de los Cinturones de Radiación Van Allen, incluyendo el programa del ADN”.

Siguiendo al trabajo de Reiser, varios pensadores se acercaron a las nociones de Noosfera o Campo Psi:

– Rupert Sheldrake a través de los campos morfogenéticos propone una explicación de un medio de comunicación telepática intra-especie.

– La noción de Peter Rusell del Cerebro Global (1982) construída en la metáfora del sistema nervioso y la comunicación electrónica, establece la idea de la Noosfera como un cerebro global planetario.

– Buckminster Fuller y el desarrollo de una percepción de diseño de sistema entero de la Tierra: Manual Operativo para la Nave Espacial Tierra (1969).

– James Lovelock y su Hipótesis Gaia (1981). Una visión del planeta Tierra como un organismo entero que evoluciona.

– Sri Aurobindo, un filósofo y místico Hindú quien experimentó lo que el llamó ‘un descenso divino’ de la consciencia ‘Supra Mental’. Se puede decir que una vez que la Noosfera ha sido construida de manera teórica en el plano del conocimiento y ubicada en el mundo de la consciencia, experimentaba, a través de Sri Aurobindo, un ‘descenso divino’ y se precipitaba por primera vez como ‘la consciencia Supra Mental’ dentro de una forma humana. De cualquier modo y con el ‘descenso de lo Supra Mental’, sus profusas descripciones de la consciencia, específicamente la definición de la Supermente, el papel de la Mente Superior, y el principio del descenso de lo Supra Mental, Aurobindo nos entrega los mejores relatos sobre la Noosfera desde la óptica de la evolución de la consciencia y gracias a este acontecimiento se abre la posibilidad, para toda la humanidad, de una evolución de la consciencia más expandida.

– José Arguelles. El trabajo de José Argüelles propone una conclusión esencial a la teoría de la Noosfera.

La premisa fundamental de la teoría de la Noosfera de Argüelles es que sólo puede manifestarse a través del esfuerzo consciente de una parte o al menos, de una minoría humana informada e iluminada. La inclinación activista de Argüelles hacia la manifestación de la Noosfera comenzó con su trabajo en la creación del Primer Festival de la Tierra Entera (1970), la visión de lo que fuera establecido como una aldea global vinculada por la meditación.

El contacto con el astrólogo y filósofo de sistemas enteros, Dane Rudhyar, cuyo libro Planetarización de la Conciencia, (1970) le da la comprensión de la Noosfera como un órgano sensorial planetario abriéndose a la “conciencia galáctica”.

La percepción holística de la Tierra fue expresada en su libro Mandala (1972), mientras que en la Visión Transformativa (1975), desarrolló una visión de la mente planetaria utilizando el modelo de los dos hemisferios del cerebro como analogía a los hemisferios globales de oriente y occidente, además de comprender un tipo de proceso dialéctico que evoluciona hacia un campo unificado de conciencia global.

Pero es en su libro Tierra en Ascenso, un Tratado ilustrado sobre la Ley que Gobierna los Sistemas Enteros (1984, 1988, 1996), que Argüelles define la Noosfera y establece el principio del Banco Psi como el almacén de información y el mecanismo de recuperación de la Noosfera.

En su percepción, el Banco Psi/Noosfera siempre ha estado operando mientras ha existido vida en la Tierra, pero hasta un momento en el futuro inminente, –el Punto Omega de Teilhard de Chardin–, ha permanecido en el inconciente.

De acuerdo con esto, el Banco Psi es responsable moderador de las diferentes etapas, no sólo en la evolución de la vida, sino que también en la evolución de la conciencia. Esto es porque el programa del Banco Psi que se encuentra entre los Cinturones Electromagnéticos de Radiación Van Allen (como lo propuso Reiser) consiste en las estructuras de información del ADN reguladas por un campo de cuatro “placas psi” bipolares –el verdadero aparato del tiempo de la noosfera.

Trabajando con las matrices del Tzolkin, –una cuenta permutacional y un calendario Maya– y del I Ching, como modelos del Banco Psi, Argüelles fue capaz de descifrar un gran sistema de códigos subyacentes a los programas que gobiernan la manifestación histórica de la civilización y su transformación inminente hacia una etapa de civilización y conciencia galáctica –la Noosfera manifestada.

En 1987 Argüelles convoca a un evento noosférico: la Convergencia Armónica, una meditación sincronizada globalmente que estableció un campo de conciencia planetaria, a través de meditaciones. Esto se manifestó en los sitios sagrados más importantes alrededor de todo el planeta.

Ese mismo año se publicó su libro señero: El Factor Maya. Un Camino Más allá de la Tecnología, con la comprensión de la matriz 13 x 20 del Calendario Maya. En ese libro, Arguelles fue capaz de descifrar los códigos del Tzolkin y determinar el Gran Ciclo de la Historia, los 13 Baktunes o 260 Katunes de duración, desde el año 3113 a.c. al año 2012 d.c. Esto significa que según las investigaciones de José Arguelles, toda la historia es una función del programa del Banco Psi.

¿Es el año 2012 el Punto Omega de Teilhard de Chardin? Si así es, entonces el período entre 1987 y el 2012 también definiría el tiempo de la transición Biosfera-Noosfera.

Otros programas Noosfericos

– Universidad de Princeton: en Internet, existe un sitio web: www.noosphere.princeton.edu.com, dirigiendo pruebas sobre la conciencia global. Se le conoce como “Proyecto de Conciencia Global: Registrando la Coherencia y la Resonancia en el Mundo”. Este grupo de Internet define la Noosfera como “la suma total de todo el conocimiento y la experiencia humana. Esto incluiría todo desde nuestros sueños más privados a nuestro conocimiento del Universo mismo”.

-Unidad de Ciencias Noosféricas de la Universidad del Mar: En Chile, desde el año 2005, se instituyó la Unidad de Ciencias Noosféricas en la Universidad del Mar. Los docentes Claudio Arenas, Francisca Navarro y María Estela Echeñique realizan investigaciones de la exploración de la conciencia a través de la Noosfera, entendiendo como Noosfera el campo resonante donde la mente manifiesta su percepción. Las experiencias de Conexión Noosférica consisten en aprovechar los momentos que marcan las épocas estivales de equinoccios y solsticios, para generar una instancia de meditación, conexión y ejercitación del campo mental planetario, a través de ejercicios simples de telepatía, intuición y excitación de la noosfera.

-En Rusia: En Rusia, la Noosfera ha avanzado como la Asamblea Espiritual Ecológica Noosfera Mundial: http://www.newhumanity.org.ru, comenzando un proceso de “estableimiento de los estándares por los cuales la humanidad llega a ser una TOTALIDAD UNICA en la vida de la Tierra”.

En marzo del año 2003 se edita la Constitución Noosférica.

En Chile, Lola Hoffmann, pionera de la Iniciativa Planetaria
En Chile, la siquiatra, fisióloga y ‘guía del crecimiento interior’, Lola Hoffmann, se entera de un proyecto mundial llamado Iniciativa Planetaria para el Mundo que Elegimos. Esto es en el año 1981. Dos años más tarde, y coincidiendo con una conferencia que dicta Claudio Naranjo en el Goethe Institut, hace el lanzamiento de la Iniciativa Planetaria en Chile.

El primer año de la Iniciativa Planetaria culmina con un acto en el Campus Oriente de la Universidad Católica, donde Lola fue la principal oradora. En ese momento, ella hace referencia a Bukminster Fuller y los sistemas enteros; a Teilhard de Chardin y la Noosfera; a Sri Aurobindo y la supermente, – que solo puede ser alcanzada con un alto desarrollo espiritual del ser humano–; a Peter Russell y su libro La Tierra Inteligente: el amanecer de la conciencia global y explica como Russell propone el nombre “Campo de la Tierra” a un campo generado por la interacción combinada de todas las mentes humanas.

El año 1985, poco antes de su muerte, Lola Hoffmann escribe su Testamento de UNIDAD:

«Estando próxima a terminar mi paso por el mundo, y habiendo dedicado parte importante de la vida al conocimiento integral del hombre, deseo expresar mi última voluntad llamando en forma vibrante y llena de esperanza a la UNIDAD de todos los seres humanos.

Exhorto a no continuar el camino de la evasión, indolencia y separatividad que sólo nos conduce al abismo de la desintegración total. Invito a todos a integrarse al proceso de conciencia global, emergente en muchos individuos y grupos humanos, como un medio para crear un mundo de armonía y UNIDAD. Cada vez es más claro que las acciones de un individuo o grupos aislados no son capaces de generar el poder necesario para resolver la decisiva emergencia que está viviendo la humanidad: sólo la UNIÓN sinérgica de todos aquellos que luchan por la vida logrará la anhelada solución, sólo la fuerza de muchos seres humanos, conscientes e interconectados, es capaz de producir un cambio de sentido en la actitud humana, coherente con la preservación de nuestra especie y habitat planetario. Este proceso de UNIDAD no implica la formación de nuevas organizaciones: cada uno continuará trabajando en su grupo o desde su perspectiva individual, para desarrollar desde ahí un pensamiento positivo y una actitud de UNIDAD. La oportunidad de unir a la humanidad es una realidad presente: no la dejemos pasar. Es el momento de UNIRNOS”.

Sus escritos y planteamientos, su pensamiento y visión de la sociedad están hoy en día muy vigentes y parte de ellos se pueden leer en: http://www.morfonet.cl/secciones/conocimiento/006.htm

El Congreso Noosférico (2009) retoma el legado de Lola Hoffmann y de todos aquellos que participaron de la Iniciativa Planetaria.

José Argüelles dice: Nos estamos moviendo desde el antiguo paradigma de “el tiempo es dinero” hacia el nuevo paradigma de “el tiempo es arte”. En el nuevo paradigma, nuestro propósito humano y la relación con la Tierra son redefinidos: somos una cultura planetaria de paz, convirtiendo a la Tierra en una obra de arte.

Nuestra misión es definir y ejemplificar los principios de una cultura planetaria de paz genuina en la Noosfera, el tiempo es arte; la sincronicidad es la experiencia normal de cada día, el planeta se iluminará al ser transformado en una obra de arte.

http://pilarventurapy.blogspot.com/2009_10_01_archive.html

Fuente: Textos recopilados de las páginas web Luz de Ilunum y Sieteluces, además de los canales de youtube Luz de ilunum y Editorial Sieteluces, textos propios y/o recopilados por el escritor e investigador José Antonio Iniesta Villanueva.