La tumba más antigua de Mesoamérica en Chiapa de Corzo
Esta semana se dio a conocer del hallazgo de una tumba de la cultura zoque en la zona arqueológica de Chiapa de Corzo. Desde Enero pasado comenzaron las excavaciones en un montículo localizado en este sitio arqueológico, y en días recientes se descubrió la tumba de un alto dignatario en la base de la pirámide, que data del año 700 antes de Cristo. Arqueólogos de instituciones como la National Geographic Society, la Fundación Nuevo Mundo y el Instituto Nacional de Arqueología e Historia colaboran en este proyecto, y es Lynneth Lowe, del Cento de Estudios mayas de la UNAM, quien nos explica la importancia de este descubrimiento, ya que la cultura es una de las más antiguas de mesoamérica y es la tumba más antigua hallada bajo una pirámide.
De Wikipedia:
Los zoques son una etnia mexicana de los estados de Chiapas, Oaxaca y Tabasco próxima cultural, geográfica y lingüísticamente de los mixes y popolucas. Los zoques de Chiapas se llaman a sí mismos O’depüt, gente de palabra. En cambio, los zoques de los Chimalapas se autonombran Angpøn, que significa los que hablan la lengua; mientras que la forma usada para su lengua es la de anepaan, que originalmente significaba “gente industriosa”, sentido que actualmente ha desaparecido.
Población y ubicación
Este grupo étnico está constituido por 100,348 personas, según el censo del año 2000. El terremoto de marzo de 1982 y la erupción del Chichonal afectaron profundamente al área zoque y provocaron la reubicación de casi 12000 zoques en otras áreas del estado de Chiapas. De esta forma hoy en día los zoques habitan en sus comunidades tradicionales, pero también en otros asentamientos de reciente reubicación y en otros tradicionalmente zoques que hoy en día han perdido gran parte de su población zoque.
El área tradicional zoque comprende la parte noroeste de Chiapas, principalmente en los municipios de Tapalapa, Amatán, Copainalá, Chapultenango, Francisco León, Ixhuatán,Ixtacomitán, Jitotol, Ocotepec, Ostuacán, Pantepec, Rayón, Totolapa, Tapilula, Tecpatán, Coapilla, Acala, Blanca rosa y Ocozocoautla. También habitaban en el norte del istmo de Tehuantepec, en el estado de Oaxaca, y una pequeña comunidad permanece en Tabasco, en el municipio de Tacotalpa.
El área de reciente colonización zoque es mucho más dispersa, en los municipios de Ixtacomitán, Juárez, Pichucalco, Chiapa de Corzo, Acala y Ocosingo. Por último, el área con otra presencia, histórica o poblacional, de población zoque se compone de los municipios de Solosuchiapa, Amatán, Reforma, Coapilla, Ixtapangajoya, Pueblo Nuevo Solistahuacán, Tuxtla Gutiérrez, Chicoasén, Cintalapa, Jiquipilas, Ocozocoautla, San Fernando, Simojovel y Huitiupán.
Conclusion:los zoques popolucos se localizan en chiapas y oaxaca. Karla itzel tarin Hernández.
Historia
Los zoques supuestamente descienden de los olmecas que emigraron a Chiapas y Oaxaca, donde se establecieron en su mayoría. En la época prehispánica, los zoques habitaban una amplia zona de Chiapas, extendiéndose hasta el Istmo de Tehuantepec y parte del estado de Tabasco. Tuvieron buenos tratos sociales y comerciales con los mexicas, lo que ayudó a la prosperidad económica de su cultura en Chiapas. Sin embargo, en 1484 fueron invadidos y sometidos por los aztecas, durante el reinado de Ahuízotl, obligándolos a rendir tributo.
La conquista española del territorio zoque se inició en 1523, encabezada por Luis Marín. Se establece el reparto de los zoques entre los encomenderos, obligándolos al trabajo forzado y a rendir tributos excesivos. Las enfermedades, la explotación y condiciones de miseria en las que vivían originaron incidentes de rebelión que fueron sofocados por las tropas de los colonizadores.
Con la independencia, la situación de los zoques no mejoró, ya que siguieron siendo explotados por los mestizos y criollos. Muchas de las leyes de reforma del siglo XIX fomentaron la concentración de la tierra en manos de una clase de grandes propietarios que mantuvieron a los indios en condiciones de servidumbre en las grandes haciendas. La recomposición del estado mexicano en estados federados contribuyó además a la fragmentación étnica, y la etnia zoque fue una de las fragmentadas por la división político territorial al dividirla entre los estados de Chiapas, Tabasco, Oaxaca y dejar a los zoque-popolucas en el estado de Veracruz.
El clima de violencia e inestabilidad política de principios del siglo XX también afectó a la etnia zoque, aunque más tarde el posterior proceso agrario y las políticas educativas con carácter integracionista instrumentadas por el estado favorecieron su desarrollo. Fue hasta 1922 cuando se les dotó de ejidos y mejoraron un poco sus condiciones de vida, pero el período posrevolucionario supuso el intento de ‘integración’ de los indios en la sociedad y cultura mexicanas, lo que disminuyó el número de hablantes de la lengua zoque.
Tradiciones
El vestido tradicional prácticamente sólo lo usan las mujeres, y en ocasiones especiales. Algunos hombres muy ancianos en las comunidades más apartadas usan camisa de manta blanca. Las mujeres usan blusa blanca de manga corta bordada en el cuello y falda larga de popelina en diversos colores.
Las viviendas son en su mayoría rectangulares de uno o dos cuartos, con paredes de bajareque o adobe encaladas por dentro y por fuera. Los pisos son de tierra, los techos de cuatro aguas de teja o paja. En las cabeceras municipales las construcciones son de cemento.
Economía
Al igual que los otros grupos, la agricultura es la principal actividad económica. La producción es muy variada, de acuerdo a las características orográficas de las zonas. Cultivan por lo general, maíz, frijol, chile y calabaza. Los cultivos comerciales son el café, cacao, pimienta, plátano, mamey, anona y guayaba. Las tierras son de baja calidad, por lo que la producción es escasa. Crían puercos y aves de corral en pequeñas cantidades como complemento para su alimentación. Sin embargo, el área natural donde viven los zoques es muy rica en recursos naturales: tres de las más importantes presas hidroeléctricas del estado de Chiapas se ubican en él (Malpaso, Peñitas y Chicoasén) y el área es rica en hidrocarburos.
Del nombre
Los zoques, tzoque, soque o zoc se llaman a sí mismos o’ de püt que significa «gente de idioma», «hombre de palabra» o, en otros términos, «verdadero», «auténtico».
Localización
El actual territorio de los zoques en el estado de Chiapas está comprendido en tres zonas específicas: la vertiente del Golfo, la Sierra y la Depresión Central, aunque debido a la movilidad geográfica del grupo esta localización no puede tomarse como definitiva.
En la vertiente del Golfo de México los indígenas zoques se concentran en los municipios de Amatán, Chapultenango, Francisco León, Ixhuatán, Ixtacomitán, Ostuacán, Solosuchiapa y Tapilula; en la Depresión Central se encuentran los de Copainalá, Chicoasén, Ocozocoautla y Tecpatán; y, finalmente, en la sierra Madre de Chiapas en los municipios de Coapilla, Ocotepec, Pantepec, Rayón y Tapalapa. Este territorio, ubicado en la región centro-occidente del estado, se caracteriza por tener una variada vegetación que incluye desde sabanas tropicales hasta bosques de hojas perennes con clima templado.
En Tabasco, los zoques se localizan principalmente en los municipios de Tacotalpa y Huimanguillo, en este último municipio, se encuentra la Zona arqueológica de Malpasito que es el único sitio arqueológico de esta cultura abierto al público.
Infraestructura
Existe una amplia red de caminos y carreteras que comunican a los distintos municipios donde hay población zoque. Éstos permiten el flujo de personas y de mercancías en distintos medios de transporte tales como autobuses, taxis y camionetas de transporte mixto ejidal.
Las carreteras principales de la región son la de Tuxtla Gutiérrez-Villahermosa, la de Tuxtla Gutiérrez-Tecpatán y la Panamericana. En los últimos años se han visto favorecidos con la pavimentación de sus carreteras desde la cabecera distrital de Copainalà hasta los municipios con población zoque, como son el caso de Pantepec, Tapalapa, Ixtacomitán, Chapultenango, Coapilla y Ocotepec, llevando con esto el desarrollo para esos municipios. Así mismo es palpable ver que en estas poblaciones con presencia zoque se han visto beneficiadas con otros medios de comunicación como son: Telefonía rural, telefonía móvil (copainalà, Chicoasèn, Tecpatàn, Coapilla).
La existencia de escuelas es evidente en los municipios con población zoque, la creación de escuelas de educación formal, educación indígena y cursos comunitarios de Conafe ha permitido que el servicio educativo llegue a las comunidades más apartadas, con ello se ha logrado que, en las rancherías más pequeñas se atienda a la población escolar desde educación inicial hasta el sexto grado de educación primaria. En los poblados principales de cada municipio se puede cursar la telesecundaria y en las cabeceras municipales, los estudios de bachillerato se pueden realizar en Copainalá, Tecpatán, Ocozocoautla, Tuxtla Gutiérrez y Pichucalco y los universitarios en la capital del estado o en Oaxaca. Recientemente en poblados que han tenido crecimiento poblacional acelerado, se han aperturados centros educativos de educación media, como son el caso de los Cobach, con ello se ha logrado atender a los egresados de telesecundarias, en su localidad de origen. Otra forma de educación no oficial es la que imparte las agrupaciones religiosas, quienes además de predicar la religión, enseñan a leer y a escribir además de algunos oficios.
Otra infraestructura en los pueblos zoques es la amplia red de Unidades Médicas Rurales del IMSS, localizadas en cada cabecera municipal, donde se atienden las necesidades básicas de salud, como enfermedades gastrointestinales y de las vías respiratorias, así como en las campañas de vacunación y desparasitación que se llevan a cabo periódicamente.
Antecedentes históricos
Se han encontrado evidencias de ocupación precerámica en la depresión central de Chiapas que datan de alrededor del año 3 500 a. C. Los pueblos que dejaron dichos restos eran cazadores, pescadores y recolectores nómadas.
Las jefaturas zoques anteriores a la llegada de los españoles seguían el patrón de relación dominante en el que las más débiles eran tributarias de las más fuertes. El área de expansión de los zoques en la época precolombina comprendió la costa de Chiapas hasta Guatemala, el Istmo de Tehuantepec, el sur de Veracruz, el suroeste de Tabasco y el centro noroccidental de Chiapas. Posteriormente, incursiones de grupos mayas, zapotecos y chiapanecos redujeron su territorio y los sometieron al pago de tributo. Hacia 1484 los aztecas consolidaron la conquista de Chiapas, razón por la cual los zoques del centro y del occidente del estado empezaron a pagarles tributo. La llegada de los conquistadores españoles en el siglo XVI redujo aún más el territorio zoque y aumentó el monto de sus tributos.
La capital de una de las principales tribus zoques era Quechula, actualmente bajo las aguas de la presa de Malpaso. La casta guerrera tuvo como capital a Janepaguay en los valles de Ocozocuautla y La Ciénega. En el desaparecido municipio de Francisco León (enterrado por la erupción del volcán Chichonal) se encuentran las ruinas de Gualeguas, antigua ciudad zoque. Otra jefatura zoque se asentó en el actual Cunduacán, Tabasco.
Los zoques que poseían las tierras más codiciadas, como los que habitaban en la depresión central, cercana a Tuxtla Gutiérrez y en los valles occidentales, adoptaron rápidamente el castellano y los valores y costumbres del grupo dominante. La Corona española sometió a los zoques a los trabajos más pesados y los concentró en aldeas. Por el trabajo forzado y las enfermedades recién adquiridas, los zoques disminuyeron drásticamente en número.
En la depresión central, los españoles se dedicaron principalmente a la cría de ganado y al comercio de cochinilla, algodón, azúcar y cuero, dejando a los zoques el trabajo agrícola y las actividades tradicionales como el tejido de mantas, en el cual alcanzaron gran perfección. Los malos tratos y el trabajo forzado originaron descontento entre la población zoque, dando origen a incidentes de rebelión que fueron sofocados por las tropas de los colonizadores.
La Independencia significó para la población zoque un nuevo periodo de explotación y trabajo forzado al servicio de nuevos amos, mestizos y laicos. Durante el siglo XIX se promulgaron leyes que favorecieron la concentración de la tierra en pocas manos, formándose así una clase de grandes propietarios agrarios en la región que mantuvieron a los indios en condiciones de servidumbre en las grandes haciendas.
A partir del reparto agrario iniciado después de la Revolución mexicana, los zoques entraron en un proceso de «integración» a la cultura nacional. Aunque ha disminuido notablemente el número de hablantes de zoque se mantiene viva la vida ritual y ceremonial de estos pueblos.
Lengua
La lengua indígena utilizada por este grupo es el zoque, la cual pertenece a la familia lingüística mixe-zoque-popoluca. parecida a los olmecas se encuentra en kechula debajo de la presa de malpaso enla depresión central de chiapas se le conoce a esta lengua como put que quiere decir hombres que piensan o gente de muchos idiomas
Salud
Para la atención de los indígenas zoques se cuenta, además de las instituciones oficiales ya referidas, con un buen número de médicos tradicionales entre los que pueden mencionarse hierberos y hueseros o sobadores. Los servicios de estos últimos son solicitados sobre todo en situaciones en que los zoques atribuyen el origen del mal a brujería, envidia o mal de ojo.
Vivienda
Es tradición que el techo sea de zacate, paredes de bajareque y piso de tierra. Actualmente ésta sólo se encuentra en las rancherías más alejadas, ya que ha sido sustituida por construcciones de lámina, cemento, tabique y piedra. Las casas cuentan con un patio o solar donde se cultiva una gran variedad de frutales: mangos, limones, naranjas, anonas, plátanos, flores y plantas de uso medicinal y culinario.
Generalmente, la vivienda es de forma rectangular con una sola habitación que tiene un anexo más pequeño usado como cocina.
Artesanías
En términos generales, puede decirse que las artesanías de los zoques son variadas y vistosas, incluso que no son propias del grupo, ya que algunas de ellas, como las hechas con madera, se empezaron a manufacturar recientemente en la Casa de la Cultura de Tecpatán.
En las localidades de Tapalapa y Ocuilapa se elabora alfarería; en Ocotepec se hacen las wacas (canastas de bejuco para lavar los granos de café y cacao), que tienen una gran tradición y se comercializan a través del Instituto Marca Chiapas.
Territorio, ecología y reproducción social
En la región habitada por los zoques encontramos tres diferentes zonas ecológicas: la vertiente del Golfo, la sierra y la depresión central. La primera y la segunda zonas corresponden a las llamadas montañas del norte, con altitudes que superan los 2 mil msnm. El clima predominante oscila entre tropical-húmedo y templado. La vegetación original de la sierra estuvo formada por selvas y bosques tropicales, así como bosques de pino-encino-liquidámbar; el paisaje actual se compone de milpas, cafetales, sierras en barbecho, pastizales y tierras inaprovechables como acantilados rocosos y páramos.
La propiedad de la tierra en los municipios serranos es privada y ejidal. En la primera impera la ganadería extensiva mientras que en los ejidos se practica la ganadería, el cultivo del café y la agricultura de subsistencia.
La depresión central se caracteriza por altitudes entre 500 y 800 msnm. La vegetación es variable aunque predominan las acacias y los nances en los alrededores de Tuxtla Gutiérrez y los valles de Ocozocuautla y Jiquipilas. Al norte, ya en plena selva de Malpaso, la vegetación corresponde al clima de tipo lluvioso con árboles de más de 40 m de altura. El Grijalva es el gran río que atraviesa la zona y en el que a lo largo de su curso se han construido las presas hidroeléctricas de Chicoasén y Malpaso. Aquí, la mayor parte de la tierra es de propiedad privada y está dedicada a la ganadería. Los campesinos de la zona son fundamentalmente agricultores de subsistencia. Los zoques que habitan en las ciudades de Tuxtla Gutiérrez y Ocozocoautla desempeñan trabajos por su cuenta como mecánicos, herreros, comerciantes o empleados a sueldo en el sector de los servicios.
En la vertiente del Golfo, la zona está cubierta de pastizales para la cría de ganado, propiedad de mestizos. En esta zona se descubrieron grandes yacimientos petroleros que ahora está explotando Petróleos Mexicanos. La población campesina ha sido desplazada de varios lugares y muchos se han tenido que ocupar como peones en las compañías perforadoras.
Organización social
Los zoques son un grupo heterogéneo. Aunque en todos los municipios la religión sigue siendo elemento importante de cohesión social, ésta ya no ejerce ningún papel en la administración civil de los municipios. Aproximadamente hasta 1940, el sistema de cargos civil-religioso seguía vigente en la mayoría de los municipios del área; sin embargo, la integración de la región a la vida nacional ha propiciado la diferenciación social en el interior de las comunidades, y los sistemas de autoridades tradicionales han dejado de tener injerencia en la vida política de estos pueblos.
El ciclo ceremonial tradicional de los pueblos zoques sigue en manos de los sistemas de cargo, de los cuales destacan los mayordomos, priostes, albaceas, rompedores, alférez y fiscales.
Cosmogonía y religión
En la cosmogonía de los zoques, el sol juega un papel importante ya que es la deidad principal y se asocia directamente con Jesucristo. Existen entidades malignas que en todo momento amenazan la vida de los zoques y hay que estar preparado respecto a ellas y saber cómo evitar su ira. Así, por ejemplo, cualquier caída al suelo se interpreta como un intento del «dueño de la tierra» por apoderarse del alma de la persona; o bien, deben protegerse durante el sueño, ya que en este estado el alma del zoque vagabundea libremente, y el espíritu de la noche está al acecho con el fin de «robársela», dejando al cuerpo sin alma. El diablo, aunque es una entidad católica, se asocia con distintos espíritus del mal que encarnan en animales.
Encontramos tres grupos religiosos entre los zoques: los católicos, los adventistas o protestantes y los que se reconocen como «costumbreros». Existe un rechazo y una falta de reconocimiento de unos a otros, lo que propicia conflictos por la obtención de poder.
Es importante señalar que entre los costumbreros, a pesar de no reconocer al sacerdote católico como la máxima autoridad, admiten y celebran a los santos católicos; llevan a cabo fiestas tradicionales, danzas y sacrificios rituales. Para estas celebraciones existe un complejo sistema de organización cuya jerarquía se basa en la edad de los participantes: los más ancianos ocupan los cargos más importantes y los jóvenes los de auxiliares. Tienen como lugares sagrados, además de las ermitas y las casas de los «cargueros», las cuevas y las montañas del territorio.
Fiestas
Las fiestas tradicionales de los zoques se mantienen y llevan a cabo con mayor suntuosidad y organización en las áreas urbanas (como Tuxtla Gutiérrez y Ocozocoautla) que en las rurales. Esto se debe a que en el contexto urbano la celebración de la fiesta ha alcanzado un estatus más alto que en otras localidades, además de que existen mayores recursos económicos para realizarla.
Cada localidad celebra al santo de su advocación y algunas otras fiestas católicas de importancia, como el día de la Candelaria (2 de febrero), de los Santos Reyes (6 de enero) y el Carnaval cuya fecha varía y puede durar hasta una semana. En todas ellas hay danzas, bailes, música, misas y procesiones efectuadas por los propios habitantes de la localidad o por grupos especializados, como el del barrio de Santa Ana, Copainalá que lleva a cabo presentaciones dentro y fuera del municipio tanto en ocasiones rituales como en festivales de danza folclórica.
Relaciones con otros pueblos
El esquema de subordinación de los indígenas frente a los mestizos que se observa en todo el país está presente en las comunidades zoques.
El grupo mestizo se caracteriza por acaparar el poder político y económico, dejando a la población indígena los puestos menos importantes. De este modo, es común ver que el presidente municipal, el jefe de la policía, el dueño de la tienda más grande y próspera del cafetalero con más recursos económicos es un mestizo mientras que los sirvientes, empleados o peones son indígenas.
El papel de los zoques como campesinos minifundistas se reduce a ser pequeños productores de granos básicos, café, ganado y algunos productos artesanales como la alfarería y la cestería. Constituyen también la fuerza de trabajo básica para ganaderos y finqueros mestizos, así como para algunas actividades del mercado laboral en ciudades como Villahermosa, Cancún, Coatzacoalcos y Tuxtla Gutiérrez.
En las ciudades, los zoques mantienen una relación desigual con la población mestiza en calidad de empleados domésticos, conductores de camiones de carga, comerciantes, etcétera. Esta interacción no les impide seguir reconociéndose como zoques, utilizar su lengua entre ellos o bien acudir a su localidad de origen en los días de fiestas.
Las relaciones que existen entre los zoques y los miembros de otros pueblos indígenas, principalmente tzotziles son, en general, cordiales; algunos ejidos de los municipios de Rayón, Pantepec y Tapalapa son habitados y usufructuados en común, sin que se hayan presentado dificultades que se puedan atribuir a diferencias étnicas. Por el contrario, los zoques de Pantepec prefieren acudir a los médicos tradicionales tzotziles que a los de su propio grupo.
Para subsistir, los zoques también se emplean como asalariados en las ciudades en la industria de la construcción.
Fuente: Textos recopilados de las páginas web Luz de Ilunum y Sieteluces, además de los canales de youtube Luz de ilunum y Editorial Sieteluces, textos propios y/o recopilados por el escritor e investigador José Antonio Iniesta Villanueva.