365 FLORES DEL CORAZÓN. SERVICIO – NOVIEMBRE (DEL 1 AL 15). POR SRI CHINMOY

CURSOS DE LUZ

365 FLORES DEL CORAZÓN



NOVIEMBRE 2011 – SERVICIO (del 1º. Al 15)

Por Sri Chinmoy

1 de noviembre

Elige servir.  El mundo comenzará a amarte inmediatamente.

Una persona espiritual ha encontrado su trabajo.  Su trabajo es el servicio desinteresado.  Su trabajo es la acción dedicada.  De hecho, no tiene necesidad de ninguna otra gloria.  Su acción es la divina aceptación de la existencia terrenal.  Y por esto necesita un cuerpo perfecto, una mente fuerte, un corazón fervoroso y una vida supremamente inspirada de receptividad interna y capacidad externa.

Ayer deseaba conseguir
para llegar a ser
alguien o algo grande
en el mundo.
Hoy mi deseo ha sido purificado
y transformado en la aspiración
de servir al mundo.

2 de noviembre

Para servir a Dios, deseo que mi vida sea una vida de donación desinteresada.

¿Quieres que tu vida sea de servicio a Dios, de modo que puedas colmar Su Misión?  Si es así, entonces devuélvele al alma su trono aquí y ahora.  Has expulsado al alma y has puesto al ego en su trono.  Dale la cordial bienvenida al alma y únete a ella.  En ese momento, el miedo te abandona, la ignorancia te abandona; finalmente, la muerte te abandona.  La Eternidad te da la bienvenida, la Infinitud te da la bienvenida y, finalmente, la Inmortalidad te da la bienvenida.

¿Quieres brillar?
Puedes fácilmente brillar
como el sol
en tu auto-ofrecimiento
a Dios en el hombre.

3 de noviembre

Dios me enseña a servirle en la humanidad.

¿Por qué trabajamos?  Trabajamos para mantenernos y mantener a nuestros seres queridos.  Podemos trabajar también para mantener nuestros cuerpos en perfecta condición.  Pero un verdadero aspirante ve el trabajo de otra manera.  Ve el trabajo como una auténtica bendición.  Para él, cada empleo difícil y aparentemente penoso es una bendición disfrazada.  Para él, el trabajo no es otra cosa que un servicio dedicado.  Ha descubierto la verdad de que al ofrecer los resultados de lo que dice, hace o piensa, podrá realizar a Dios.  Él trabaja por amor a Dios.  Vive por amor a Dios.  Realiza la Divinidad por amor a Dios.

En el Cielo
las almas son colocadas
conforme a sus obras de auto-ofrecimiento,
servicio al hombre
y amor a Dios,
realizadas aquí en la Tierra.

4 de noviembre

Revela constantemente lo que eres: un instrumento supremamente elegido de Dios.

Mientras realizas tus actividades diarias, deberías rezarle al Supremo, al Piloto Interno, que está actuando en ti y a través de ti.  Dios tiene infinito Interés por los seres humanos en cada una de sus actividades.  Si tú no pones interés, es una equivocación.  Pon interés pero no sientas que viene de ti.  Siente que está viniendo desde alguna otra parte y que una Mano Interna te está guiando.  Este es el enfoque correcto.

Cuando estás preparado para decirle a Dios
que tienes la voluntariedad,
Dios te dirá:
“Mira, hijo Mío, aquí estoy
con Mi Fertilidad para ti”.

5 de noviembre

Cuando soy todo devoción a la luz-servicio, estoy con el activo y para el activo.

Cuando hablamos y hablamos, entramos de forma consciente y deliberada en el dominio de la ignorancia.  Cuando hablamos y actuamos, a veces vemos un abismo abierto entre nuestro discurso y nuestra acción.  Decimos una cosa y luego hacemos algo totalmente distinto.  Prometemos solemnemente hacer algo pero, cuando aparece la realidad, vemos un inmenso abismo entre nuestra promesa y su cumplimiento.  Sin embargo cuando actuamos con espontaneidad, fervor, y sin condiciones, –cuando ofrecemos nuestro servicio dedicado– una Mano invisible nos guía, nos perfila y nos moldea conforme a la verdadera imagen de nuestro Piloto Interno. Sólo sirviendo devotamente al Piloto Interno en cada individuo podemos hacer que nuestra vida sea significativa y fructífera.

Si quieres llegar a ser un león-líder
para rugir y manifestar a Dios,
entonces, en este mismo momento,
vuélvete una oveja-esclavo del hombre,
–el Dios en evolución.

6 de noviembre

El auténtico servicio desinteresado es el que no espera un resultado favorable.

El servicio desinteresado se hace sólo por amor al ofrecimiento de uno mismo; el resultado vendrá naturalmente.  Si hay una acción, habrá una reacción.  Pero la acción no se realizará para satisfacernos a nuestra propia manera, sino para complacer a Dios a Su propia Manera.  Actuaremos cuando estemos inspirados desde adentro.  Trabajaremos conscientemente y de todo corazón.  Si trabajamos sin inspiración, estamos trabajando mecánicamente, como obreros en una fábrica en la que no quieren estar.  Nos convertimos en otra máquina.  El servicio desinteresado no es así.  Es alegre, lleno de alma, consciente y constante.  Primero, es un servicio de corazón; luego, es desinteresado; y finalmente, cuando llega a ser incondicional y a no estar preocupado por el resultado, se convierte en un servicio desinteresado perfecto.

Él es sumamente feliz
porque se ha convertido en
el vínculo
entre el amor de su corazón
y el servicio de su vida.

7 de noviembre

Dos vidas: la humana y la divina. La vida humana clama por vivir; la vida divina vive para ofrecer.

Cuando empleamos el término ‘servicio desinteresado’, no podemos ni debemos esperar nada.  Si se trata de un servicio dedicado, podemos esperar alguna recompensa; pero cuando se vuelve desinteresado, no podemos esperar recompensa alguna.  Cuando somos capaces de hacer servicio desinteresado verdadero, sin deseo o expectativa de recompensa, el resultado que conseguimos irá mucho más allá de todas nuestras expectativas.  Además, mientras realizamos auténtico servicio desinteresado, obtenemos alegría en abundancia.  No hemos de esperar ningún resultado o efecto posterior.  El servicio desinteresado es en sí mismo la alegría más grande y la recompensa más alta.

¡Ama!
Así lo sabrás todo
acerca de la vida humana.
¡Sirve!
Así lo sabrás todo
acerca de la vida divina.

8 de noviembre

El ego en mí ayuda a la humanidad.  El alma en mí sirve a la humanidad.  El Dios en mí es alimentado por la humanidad cuando comprendo que todo el mundo a mi alrededor no es sino Dios mismo.

La forma más fácil de encender la llama de nuestra aspiración es mediante el servicio dedicado y desinteresado.  Este servicio desinteresado ha de ser constante y espontáneo.  Cuando estás haciendo algo para ti mismo o para los demás, has de sentir que estás sirviendo al Supremo.

¿Quieres merecer al Amor de Dios?
Entonces sirve a Dios-el-hombre
en la creación inacabada de Dios.

9 de noviembre

Cuando estás haciendo algo para ti mismo, has de sentir que estás sirviendo a tu parte mejor, a tu parte más elevada, más noble, más colmadora, más iluminadora.  En cada momento has de sentir que eres un servidor dedicado.  De esta manera tu llama de aspiración subirá más alto.

¿Quién aspira?  El que siente que hay algo más alto, más profundo, más vasto que lo que ahora mismo tiene.  ¿Quién sirve? Si dices que el inferior sirve al superior, eso sólo es cierto en el mundo externo.  Puedes decir que un esclavo o un criado sirve al amo porque el amo es superior.  Eso puede ser cierto en el mundo humano ordinario.  Pero en el mundo interno vemos algo diferente.  Vemos que el aspirante está sirviendo a la mejor parte que hay dentro de sí mismo.  Está intentando servir a la porción más elevada de su propio ser.

Si das desde tu corazón,
tu ofrenda no sólo será
inimaginable,
sino también incuestionable.

10 de noviembre

Sirvo a Dios, no porque Él sea infinitamente más grande que yo, sino porque es mi querido Amigo de la Eternidad, mi Amado Supremo y mi todo de la Eternidad.

Cuando tú, como aspirante, sirves a tu parte más elevada, a tu mejor parte, no sólo lo haces por amor a la paz, la luz y la dicha interna, sino también con el fin de devenir totalmente uno con esa parte más elevada.  El papel del servidor terrenal termina cuando éste consigue su dinero.  Nunca se atreve a pensar en llegar a ser el jefe algún día.  Eso está fuera de su imaginación.  Pero, cuando estás sirviendo a tu parte más elevada como aspirante, has de sentir en cada momento que te estás convirtiendo en esa parte más elevada dentro de ti y que, finalmente, te volverás uno, conscientemente, con esa parte más elevada.

La naturaleza humana
no cambia
y no puede cambiar
sin el servicio desinteresado.

11 de noviembre

La Ribera Dorada del Más Allá quedará siempre a una gran distancia, a menos y hasta que no sólo creamos en el supremo secreto del auto-ofrecimiento sino que también lo practiquemos en cada momento.

De todas las maneras –a través del pensamiento, a través de la acción, a través de tu propio servicio, mentalmente, vitalmente y físicamente– has de sentir que eres un objeto de dedicación para ser utilizado por Dios y los hijos de Dios.  Si puedes sentir en cada momento que estás listo para servir a quienes aspiran, a quienes están sentados en tu mismo barco, en el Barco del Supremo, sólo entonces podrás sentir que tu llama de aspiración arde brillante, más brillante, brillantísima en cada momento.

Cada mañana debo darme cuenta
de que tengo ante mí la oportunidad dorada
de un día sin utilizar
para usarlo de un modo divino.

12 de noviembre

Una vida en la tierra no está hecha para el placer; una vida en la tierra está hecha para el auto-ofrecimiento.  El  auto-ofrecimiento nos convierte finalmente en lo que Dios es.

Cuando realmente tienes algo que ofrecerle al mundo, puedes volverte verdaderamente modesto.  Cuando un árbol no tiene frutos que ofrecer, permanece erguido.  Pero, cuando está cargado de frutos, el árbol se inclina hacia abajo.  Cuando tienes genuina humildad, es señal de que tienes algo que ofrecerle a la humanidad.  Si estás lleno de orgullo y de ego, nadie podrá obtener nada valioso de ti.

Si tu vida de servicio
sólo está aumentando el poder de tu ego
puedes estar seguro
de que eres un fracaso total
en el mundo interno.

13 de noviembre

Sirvamos al mundo con toda nuestra alma.  Recibiremos el pago a nuestro servicio en moneda de gratitud, la Gratitud de Dios.  Dios es la única gratitud.

Mientras estamos constantemente logrando algo, tenemos que acordarnos de ser modestos, a fin de dar un servicio mayor a la humanidad.  Pero primero hemos de saber que si queremos llegar a ser modestos, ciertamente es porque queremos llegar a ser felices.  Y en el auto-ofrecimiento nos hacemos realmente felices.  La auténtica humildad es la expansión de nuestra conciencia y nuestro servicio.

Cuando hago servicio desinteresado
una hora cada día,
Dios me dice
que soy Su querido amigo,
Su queridísimo amigo.

14 de noviembre

Olvida todas las experiencias infelices que hayas dado y recibido.  Piensa únicamente en cómo puedes dar alegría a los demás y hazte así feliz a ti mismo.

Antes de nuestra realización, cuando no conocemos nuestro Ser, nuestro problema es más pequeño.  Pero cuando descubrimos nuestro Ser, cuando entendemos nuestro Ser, cuando conocemos nuestro Ser, cuando realizamos nuestro Ser más elevado, en ese momento comienza el verdadero problema:  ¿Cómo ayudaremos a la humanidad?  En ese momento, si esa es la Voluntad de Dios, tenemos que dar, acepte o no la humanidad nuestro ofrecimiento.

Cómo anhelo que mi corazón
permanezca siempre
bajo el control de mi alma,
para que mi inspiración
pueda elevarse cada día
más allá de mi creencia
y mi ofrenda-servicio
nunca se vuelva mecánica.

15 de noviembre

La felicidad está en darse uno mismo.  Damos lo que somos.  Lo que somos es nuestra aspiración, nuestro clamor interno, y lo que damos es nuestra vida de dedicación.  En el auto-ofrecimiento crecemos en Dios.  El auto-ofrecimiento es el precursor de nuestro devenir en Dios.

No hay sacrificio como tal.  Lo que llamamos sacrificio es en realidad un constante darse uno mismo, basado en el propio conocimiento de la unicidad universal, y un constante dinamismo heroico que lo capacita a uno para conquistar el mar de la ignorancia en el campo de batalla de la vida y transformarlo en un mar de luz de sabiduría.  Si uno puede hacer esto, podrá entonces realizar a Dios y llegar a ser perfecto en esta vida.

Da lo que tienes
y lo que eres.
Entonces serás bendecido
con nuevas mañanas
en nuevos mundos.

Fuente: Textos recopilados de las páginas web Luz de Ilunum y Sieteluces, además de los canales de youtube Luz de ilunum y Editorial Sieteluces, textos propios y/o recopilados por el escritor e investigador José Antonio Iniesta Villanueva.