CURSOS DE LUZ
365 FLORES DEL CORAZÓN
AGOSTO 2011 – DEVOCION — (del 1 al 15)
Por Sri Chinmoy
1 de agosto
No hay otra forma de hacer un progreso consciente y constante en la vida espiritual sino ofreciendo constantemente tu intensa devoción al Piloto Supremo en ti.
La devoción es la completa sumisión de la voluntad individual a la Voluntad Divina. La devoción es adoración. La adoración es deleite espontáneo brotando del corazón. ¿Quién puede ser el objeto de nuestra adoración? Dios. ¿Cómo podemos adorarle? Mediante la entrega de nosotros mismos.
Mi querido Señor
quiero ser guiado
todos los días.
Mi dulce Señor
quiero ser guiado
de todas las formas.
Mi amado Señor
anhelo ser guiado
a lo largo de todo el camino.
2 de agosto
La devoción es la beatitud misma. Esta beatitud es el amor de la auto-dedicación vuelto hacia Dios, buscando servirle constante e incondicionalmente para que Él pueda ser colmado en el Cielo y en la Tierra.
La devoción es una emoción que conmueve el alma. Penetra dinámicamente la conciencia entera del devoto. La devoción es acción. Esta acción siempre está inspirada por el ser interno del devoto. La devoción trae renunciación. La verdadera renunciación nunca es una vida de desolación. La renunciación es un total disgusto por la vida animal de la carne. Y también es la ausencia total de ego. Una vida de verdadera renunciación es una vida que vive en el mundo pero no obtiene sus valores del mundo.
¿Estás cansado de ser quien eres?
¿Lo estás?
Entonces dale a Dios por primera vez
la oportunidad de cuidar de ti.
Dios fácilmente puede cuidar de ti
y sin duda lo hará.
Sólo tienes que darle la oportunidad.
3 de agosto
Repito el nombre de Dios, no porque crea que repitiendo Su nombre podré destapar los oidos de Dios, sino porque cada vez que repito su nombre Le veo en diferentes formas de belleza interna.
Las manifestaciones de la devoción son la sencillez, la espontaneidad, la belleza y la pureza. Las manifestaciones de la devoción son los intensos y devotos sentimientos de uno por su objeto de adoración y la consagrada unicidad de uno con su Piloto Interno.
Escucharé Tu mandato, lo haré.
Volaré y volaré en Tu Cielo.
Tú eres mío, eternamente mío.
Eres la riqueza de mi corazón.
Por Ti verteré lágrimas en la noche.
Por Ti sonreiré con luz al amanecer.
Por Ti Amado, por Ti, sólo por Ti.
4 de agosto
Seis palabras que concluyen todo: “Señor, sólo Te amo a Ti.”
Ando por el sendero del amor, la devoción y la entrega. Primero Le ofrezco mi amor a Dios, luego Le ofrezco mi devoción a Dios y finalmente Le ofrezco mi entrega a Dios. Cuando Le ofrezco a Dios mi amor, siento que Él es el único cuyo amor necesito para progresar. Cuando Le amo, descubro que Él no es otra cosa que mi propio ser, mi existencia más elevada, mi existencia más iluminada. Normalmente, cuando amamos a alguien, lo que estamos amando es una individualidad y una personalidad diferente. Pero cuando amamos a Dios, sentimos que Él es nuestra propia Realidad más elevada y más iluminada.
Has anclado tu corazón
en el infinito Amor de Dios.
Por eso
no tienes que preocuparte
por nada
en el mundo de los sueños
o en el mundo de las realidades.
5 de agosto
La devoción es dedicación. La dedicación le proporciona al devoto plenitud de sí mismo. La plenitud de sí mismo es la Infinitud de Dios.
Por favor, no descuides tu gran promesa a Dios. Antes de venir al mundo, antes de vestir tu envoltura humana, le dijiste a Dios, tu dulce Señor, con toda la sinceridad de que disponías, que participarías en Su Juego Divino. Él te dijo: “Hijo Mío, cólmame, y cólmate al mismo tiempo a ti mismo en la tierra”. Tú te sentiste divinamente conmovido; tu alegría no conoció límites. Dijiste: “Padre, así lo haré. Que mi promesa llena de alma sea digna de Tu compasivo Mandato”.
Mi Señor,
me hiciste feliz
al hacerme Tu servidor.
¿No me harás infinitamente más feliz
convirtiéndome en Tu esclavo?
6 de agosto
Amo a Dios por Dios mismo. Existo en la Tierra para complacerle a Su propia Manera.
En la vida espiritual, el sendero soleado se llama devoción. Este sendero es sin duda el atajo hacia la realización de Dios. Es cierto que Dios y Sus misterios están más allá de la comprensión del habla y el intelecto. Pero igualmente cierto es que Dios es fácilmente accesible a través de la devoción.
Mi corazón no se desvanecerá
porque
cuidadosamente he puesto su belleza
en el Corazón de Compasión de mi Señor,
y alegremente he puesto su fragancia
a los Pies de Salvación de mi Señor.
7 de agosto
Vivir una vida consagrada es ser un niño consciente de la Voluntad de Dios.
Un verdadero devoto obtiene enorme alegría cuando siente: “Todo esto soy yo”. Y obtiene aún más alegría cuando siente: “Todo esto eres Tú”. Y recibe la mayor alegría cuando siente: «Tú eres el Amo, yo sólo soy el instrumento”.
Quien sigue el sendero del conocimiento Le dice a Dios: “Padre, Te quiero”. Quien sigue el sendero de la devoción le dice a Dios: “Padre, Te necesito”. El primero Le dice a Dios: “Padre, yo Te tengo”. El segundo Le dice a Dios: “Padre, Tú me tienes”.
Mi Señor Supremo
dame la capacidad
de mirarte en cada momento
y no sólo
cuando a mí me gustaría mirarte.
8 de agosto
Respira cada día una oración a Dios con toda tu alma. Entonces puedes llegar a ser insomnemente fiel a la Luz-Visión de Dios.
En el sendero soleado, como en otros senderos, el devoto aprende que no importa cuanto reza y medita sino cómo reza y medita. Si reza y medita en el Supremo con sinceridad y sin reservas, está meditando y rezando diez veces en una.
Cuando rezo
me arrodillo
devota y secretamente.
Cuando medito
levanto mi corazón
fervorosa y perfectamente.
9 de agosto
Mi única responsabilidad es satisfacer la Voluntad de Dios.
Un devoto aspirante, como todo el mundo, tiene sus necesidades. Pero sus necesidades siempre son vistas junto al Amor y la Compasión de Dios. Un verdadero devoto ha llegado a comprender que no ama a Dios para satisfacer sus propios deseos humanos sino para satisfacer a Dios a la propia Manera de Dios. Para una persona que no aspira, la vida es un castigo, una pura tortura. Para un alma aspirante, cada momento en la vida es una oportunidad para la auto-iluminación y la satisfacción de Dios. En el camino soleado de la devoción, el aspirante sabe que, de la misma manera que él está hambriento de la Compasión infinita de Dios, Dios está hambriento de su sentimiento constante de unicidad consciente con Él.
Dije lo que tenía intención de decir:
“Mi Señor es todo Compasión”
Tenía intención de decir lo que dije:
“Sin duda me convertiré en
un perfecto instrumento de Dios”.
10 de agosto
Si pides siempre la bendición de Dios, Él te enseñará cómo hacer tus tareas internas.
A un niño no le importa saber lo que su madre es. Sólo quiere la constante presencia amorosa de su madre junto a él. Similar es el sentimiento del devoto por su Señor. Muchos salen a su paso para ayudarle a lo largo del viaje de su vida, pero a él no le interesa su ayuda. Sólo la Gracia de Dios es su ayuda y su refugio. Las torturas del infierno son demasiado débiles para atormentarle si él está allí con su Señor; su vida en el infierno es una vida de perfecta dicha. Sus sufrimientos y tribulaciones en el Cielo no conocen límite si su Señor no está allí junto a él.
Anhelo y suspiro por Vos.
Cada día me convierto
en semilla de amor,
planta de devoción,
árbol de entrega.
Oh Señor, no te olvides de mí
en mi externo deambular sin rumbo
por todas partes.
Oh Señor, haz de mi corazón peregrino
el viajero del descubrimiento de sí mismo
el emperador de la maestría en la vida.
11 de agosto
La devoción intensifica el hambre interna del buscador, purifica su avaricia externa y consolida su perfección integral.
A diferencia de los demás, un devoto siente sinceramente que no tiene más posesión que su deseo de Dios. Este deseo es su joya. La Joya de Dios es Su propia Gracia. Al ofrecerle su joya a Dios, el devoto amarra a Dios. Al darle Su Joya al devoto, Dios lo libera y lo colma.
Dios y yo hemos desempeñado
nuestros papeles respectivos.
Yo he hecho más profunda
mi fe en Él.
Él ha reconfortado completamente
mi corazón.
12 de agosto
La tortura de mi antiguo miedo está siendo ahora transformada en el éxtasis de mi corazón. ¿Cómo? Precisamente en virtud de mi purísima aceptación de Dios.
Sólo queremos ser lo que Dios es, o sea, Paz infinita, Luz infinita, Dicha infinita. No queremos nada del mundo. Si el mundo nos tortura, nos decepciona o nos malinterpreta, es cosa suya. Nosotros no esperamos nada del mundo pero esperamos una cosa de nosotros mismos, y esa cosa es que llegaremos a convertirnos en Dios mismo.
Yo canto porque Tú cantas.
Sonrío porque Tú sonries.
Porque Tú tocas la flauta
yo he devenido Tu flauta.
Tú tocas en lo profundo de mi corazón.
Tú eres mío y yo soy Tuyo.
Esta es mi única identificación.
Bajo una sola forma
Tú eres mi Padre y mi Madre eternos,
y la Conciencia-luna,
Conciencia-sol que todo lo penetra.
13 de agosto
¿Sabes lo que ocurre en realidad cuando rezas con toda tu alma? Cuando rezas con toda tu alma empiezas a parecerte más y más a tu Amado Supremo.
Cada vez que pensamos en Dios, deberíamos sentir que Él es nuestro Ideal, nuestra Meta. Al mismo tiempo, tenemos que saber que el objetivo no es ver esa Meta o alcanzar esa Meta. Nuestro objetivo es convertirnos en la Meta misma. Dios no espera otra cosa de nosotros. Él quiere que seamos lo que Él es. Si este es nuestro objetivo, entonces, cuando pensamos en Dios, cuando rezamos a Dios, cuando meditamos en Dios, Él siente que nuestro pensamiento, nuestra oración y nuestra meditación, son absolutamente correctos, absolutamente divinos.
Rezo a Dios para que me conceda
los Pies de plata de Su Luna.
Medito en Dios para que me conceda
el Ojo dorado de Su Sol.
14 de agosto
De ahora en adelante, permaneceré siempre consagrado a mi vida interna.
Piensa en el Supremo. Sentirás que tu vida tiene algún significado. Medita en el Supremo. Sentirás que Dios te necesita. Ofrécete al Supremo. Sentirás que el Supremo ya ha ofrecido Su Hálito de Vida y Su Existencia misma a ti, al buscador en ti, para toda la Eternidad.
¿Quieres oír
lo que dices mientras duermes?
Dices que amas sólo a Dios
y necesitas sólo a Dios, a nadie más.
15 de agosto
Cuando pronuncias el nombre de Dios, las cualidades divinas de Dios –pureza, paz, amor, dicha y muchas otras– entran de inmediato en ti.
Dios es mi experiencia personal. En Él está la confianza de mi vida. Conmigo está Su garantía en la vida y en la muerte y más allá del tiempo y el espacio. Vivo para Dios. Vivo para servirle con la entrega de mi corazón y la alegría de mi alma. Él vive para mí. Vive para obsequiarme con Su Visión todo trascendente y para transformar mi existencia en Su Realidad Celestial.
Fuente: Textos recopilados de las páginas web Luz de Ilunum y Sieteluces, además de los canales de youtube Luz de ilunum y Editorial Sieteluces, textos propios y/o recopilados por el escritor e investigador José Antonio Iniesta Villanueva.